Edificios característicos: una fusión de estilos arquitectónicos manchú, han y mongol, con salones como el Dazheng y el Chongzheng, que muestran el esplendor real y la profundidad histórica.
Gastronomía cultural: la serie "Té del Palacio Qingning", pastel de mousse del Salón Dazheng, etc., donde se combinan el sabor y la cultura, una experiencia del Palacio Imperial en el paladar.
Experiencia de patrimonio cultural inmaterial: exhibición y enseñanza de técnicas como la xilografía y el bordado manchú, con prácticas manuales para experimentar el encanto único de la cultura tradicional.