Suba a bordo de un tradicional velero local construido con madera y bambú, y comience su aventura de exploración de islas.
Una vez que zarpa, la fresca brisa nocturna acaricia la piel como seda natural, brindando una comodidad perfecta.
Cuando el velero se desliza a lo largo de la sinuosa costa, la brisa marina fresca inyecta un vigor revitalizante, haciendo que la experiencia de navegación sea tan refrescante y estimulante como el mentol al tragar.