Mario D
5 de octubre de 2024
Quiero dejar mi crítica siendo lo más objetivo posible. Antes de comenzar hay que entender que un hotel 4* en Túnez corresponde a un 3* en España, luego a la hora de decidir, es importante tenerlo en cuenta. El hotel es enorme y cuenta con gran variedad de instalaciones. Piscina, playa privada, spa (de pago), gimnasio, 2 restaurantes, etc, etc. Está a 5 minutos caminando de la zona comercial de Hammamet y a 15 de Cartagoland, lo cual está muy bien. Las habitaciones son amplias y (al menos la nuestra) cuentan con aire acondicionado que se puede regular al gusto. El hotel necesita una limpieza de cara y alguna que otra reforma, sobretodo en los baños. La limpieza deja mucho que desear, sobretodo en los baños públicos del hotel. En las habitaciones había veces que se dejaban sin reponer toallas, papel higiénico... Pero si se lo pedías al personal de la limpieza, dos accedían sin problema a dártelo. El internet funciona muy bien en la zona de recepción. A nosotros en la habitación no nos funcionaba. Depende de si vas a desconectar o necesitas estar conectado puede ser una ventaja o un inconveniente. No se puede reservar hamacas ni en la piscina ni en la playa, pero todo el mundo las reserva en la piscina y es muy complicado encontrarlas libres, así que si me estás leyendo, sí, reserva tu hamaca como hace todo el mundo. En la playa no hay problema. Los horarios, como pasa en casi todos los sitios, no son para españoles. Si vas ligeramente tarde a comer te encontrarás con que no reponen e incluso te empiezan a echar. En el comedor "mediterráneo" los horarios no son tan estrictos y se está muy tranquilo porque hay poca gente y no se forman las colas que se forman en el comedor principal. Pero encontrarás poca variedad de comida. Nosotros nos acostumbramos, nos hicimos amigos de los cocineros (una propina siempre ayuda) y se portaron bien con nosotros. El servicio de "late check out" es bajo disponibilidad. A nosotros nos lo denegaron. Te hacen dejar las maletas en el hall de recepción sin ninguna otra supervisión que unas cámaras de vigilancia (que a saber si funcionan). Nosotros pedimos que nos las guardaran en su oficina y, a regañadientes, accedieron. Es un hotel donde van a pasar el fin de semana y sus vacaciones sobretodo argelinos. Nosotros no tuvimos mayores problemas, pero, depende de tu grado de tolerancia, puedes acabar muy harto. Hay normas en el hotel, pero nadie las respeta, en especial estas personas. ⚠️ Hay que tener cuidado con la playa. Es tranquila para bañarse pero hay medusas. Llegamos a ver una raya. Con tener cuidado debería valer. Obviamente los vendedores ambulantes te van a quererte vender cosas o coger un viaje en camello, en lancha con parapente... Con un "no gracias" basta para que no te atosiguen. ⭐⭐⭐⭐ En definitiva, un hotel de batalla, muy masificado donde vas a pasar una semana de vacaciones sin lujos y sin mayores problemas. Si tuviera que recomendárlo a un amigo, lo haría.