Xitang Inn

Ubicación inmejorable. Edificio antiguo. No hablan ingles

El hotel tiene una entrada y recepción terrible, en una tienda en un edificio muy destartalado, al llegar por la noche dio realmente miedo la calle. Tuvimos que subir cuatro pisos andando con las maletas y no nos ayudó nadie, la habitación estaba aceptablemente limpia pero había un fuerte y desagradable olor a cañería, la cama hacía ruido al moverse. La persona de la recepción al que le pedí que me ayudará en la compra de las entradas para los Guerreros y así lo hizo amablemente, aunque no lo consiguió, apareció a la 1 de la madrugada, cuando ya estábamos durmiendo, llamando a la puerta para no sé qué asunto. A la mañana siguiente el desayuno es tan tarde que aunque pagado no lo pudimos aprovechar. Nos guardaron las maletas pero dejándolas en la recepción, en medio de la tienda, un lugar que parecía poco seguro, aunque no pasó nada. Al marcharnos y preguntar cuanto costaban unas figuritas de los Guerreros de Terracota nos dijo la chica de recepción que nos regalaba una si poníamos una buena reseña y no la cojimos.

Está situado en un calle muy bonitas, llena de artesanos. En la puerta hay un guerrero grande de Terracota que ayuda a localizarlo.

La habitación era cómoda, pero la limpieza deficiente. El servicio de desayuno complejo de entender: no vimos bufé, como se anuncia, por ningún lado. La ubicación muy buena, en cambio.

Excelente. La gente de recepción muy amable. Servicio de consigna y lavadora gratuitos. La habitación estupenda, ligero olor a tubería en la ducha que no molesta gran cosa, pues está separado de la habitación por puerta y mampara. Muy limpio. Buen ambiente, terraza con bar restaurante. Un placer, lo recomiendo.

Excelente ubicación y personal muy amable, en el centro de un casco antiguo cerca de una calle llena de artesanías y comercios, además lugares de turismo de interés