nataliaf88
27 de julio de 2024
Empezamos nuestras vacaciones con unos días de relax en la playa y no pudieron ser mejores. El hotel conserva el encanto de la arquitectura local pero con todas las comodidades. El personal es maravilloso, atento, simpático, amable y siempre tienen una sonrisa para ti. Hicimos una excursión en barco a la isla de Bazaruto y otro día una en dhow, las embarcaciones locales, vimos ballenas playas paradisíacas en las que estabas prácticamente solo. Paz, tranquilidad, relax, desconexión. La comida es muy buena, se hace al momento por lo que, a veces, hay que esperar pero merece mucho la pena. Muy recomendable Las vistas al mar son maravillosas y cuando hay marea baja puedes caminar infinito y disfrutar de la arena fresca y agradable