Albergo San Marco

La ubicación es excelente, los cuartos son pequeños pero tienen de todo, hasta una pequeña cafetera de cápsulas, el personal y la limpieza también están muy bien, si tengo que ponerle un pero es al desayuno, es un poco flojo, pero el resto está muy bien. El día que llegamos nos dijeron que en el restaurante nos harían un 10% de descuento por ser clientes, pero parece ser que el metre no estaba enterado y al final por no discutir lo dejamos pasar, pero fue un detalle feo, claro que esto es problema del restaurante no del hotel.

Fantástico en todo. Calidad, precio, limpieza, comodidad, baño muy completo ubicación, trato,todo 10. Recomendable al 100x100. Los empleados de todos los departamentos educadisimos y correctos. Muy amable todo el mundo. Lo mejor a 20 metros de plaza san marcos

Hemos pasado cuatro días en este hotel y ha sido fantástico. La ubicación es genial, a pocos metros de la plaza de San Marcos. El personal muy amable, te ayudan en todo lo que pueden, tanto en recepción como el personal del desayuno. La habitación y el baño muy bien decorados y modernos, con café y agua gratis, y se estaba muy calentito, lo cual se agradecía con el frío que hacía en la calle. Las toallas de muy buena calidad. Al reservar, por el precio y al no ver fotos del baño, pensé que sería peor de lo que se podía ver en su web... pero al llegar vimos que estaba genial, mucho mejor de lo esperado. Sin duda uno de los mejores hoteles de ciudad en lo que he estado, y con una gran relación calidad/precio. Totalmente recomendado!!!

Si querés vivir una experiencia de antaño, este es el lugar. Hotel excelentemente ubicado. A metros de la Plaza San Marco. Fuimos 2 adultos y 2 adolescentes. Nos dieron 2 habitaciones. Todo hace ruido en este hotel. Los pisos, las ventanas, las puertas, las camas, Todo!. Si bien las toallas y las sábanas estaban limpias, todo es viejo acá. El baño es diminuto y limpio. Si estás un poco gordito, no entras en la ducha. Olvidate de bañarte. Las habitaciones chicas, oscuras, decoradas con un gusto peculiar. Con frigobar, ocupando lugar sin sentido. Desayuno aceptable. Completo. Buen internet. La atención fue muy buena, amables y predispuesto a ayudar. Si la intención es remontarse a siglos pasados, este es el hotel.

JAMAS acepten la habitación 502, se escucha todo el día el paso del agua por las tuberías. Es un hotel viejo pero cuidado, está a unos metros de la Plaza San Marcos, las habitaciones son medianas pero una pareja se ajusta sin problema. El baño es de buen tamaño aunque las dimensiones de la regadera son ridículas. El servicio es bueno, el desayuno muy normal.