Usuario invitado
16 de octubre de 2022
Elegimos este hotel por su encanto y ubicación. Bienvenida helada (empiezan diciéndonos que no tenemos reserva, para luego reconocer un error). Habitación con ventana que da a un rellano, muy oscura (falta de iluminación). No hay televisión, sólo hay enchufe. No hay minibar, ni hervidor de agua, sólo se ofrecen bebidas de autoservicio a los clientes, sino café que uno mismo prepara por 4,50 €… (¡¡precio digno de un palacio!!). En resumen, no hay servicios dignos de esta categoría. Teniendo en cuenta todos estos elementos, preferimos abstenernos del desayuno continental (22€)
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