Nela M
13 de enero de 2025
Reserve la casa completa para 24 personas y 3 perros del 30/12/2024 al 02/01/2025 porque nos pareció una casa muy bonita y el entorno es precioso. Cuando hablé con Jon, el dueño de la casa, me dijo que el precio para las 3 noches era de 900€/Noche más algo de IVA reducido. Acepté y me pidió los datos personales de mi marido y míos, además de una tarjeta de crédito. Le pregunté cuanto le teníamos que dar como señal para hacer la reserva y me dijo que una noche. Como le dije que me parecía un poco caro, él mismo, y no yo como quiere hacer creer ahora, me propuso hacer una transferencia de 990€ por la primera noche, como señal, y el día 2 al irnos pagarle 1.800€ en efectivo por las otras dos noches restantes ya sin IVA. Está claro para qué quería hacerlo así. El día 1 de diciembre, para sorpresa nuestra y, sin previo aviso ni autorización por nuestra parte, nos hace un cargo en la tarjeta de otros 900€. Cuando le pido explicaciones me dice que es el pago por la segunda noche y que ya nos había avisado de que lo iba a hacer. esto es totalmente falso, utilizo la tarjeta fraudulentamente y, al final, se vio obligado a retirar el cargo. Ya en la casa, el día 31 de diciembre, me dice que tenemos que pagarle los 1.800€ restantes porque tenía que hacer el ingreso en 2024 y llevarlo al banco. Le dijimos que viniera a la casa y así también nos revisará los termostato de las habitaciones porque estábamos pasando frío, las chimeneas no funcionaban bien y el agua tampoco salía caliente para ducharnos. Esto le sentó fatal y cuando llegó a la casa entró por el jardín, sin ni siquiera llamar a la puerta. Después de escuchar lo que fallaba nos echó la culpa de todo a nosotros, diciendo que nosotros lo estábamos haciendo todo mal y que a 22 grados era imposible que estuviéramos pasando frío, que eso era porque estábamos dejando las ventanas abiertas, cosa totalmente falsa, y que si lo necesitábamos podíamos coger mantas de los armarios. Fue una conversación super desagradable, y nos trató como si fuéramos idiotas y no nos enterásemos de nada, una auténtica vergüenza. Además entró en todas las habitaciones sin llamar y, sin antes preguntar si había alguien dentro. y, por supuesto, se llevó los 1.800€ en efectivo, y luego tenemos que escuchar que los que no queríamos pagar el IVA éramos nosotros. Cuando le dijimos qué esto era ilegal nos dijo que entonces nos iba a hacer factura, pero claro está, sin avisar. Ya, por la noche intentamos utilizar el horno para terminar de hacer la cena pero fue imposible, no funcionaba bien y terminamos haciéndolo en las chapas de la cocina, y no le avisamos para no molestarle. El día 1 desistimos de volver a utilizar el horno, pero claro, según él es que no supimos utilizarlo. El día 2, cuando nos íbamos a ir, se presentó en la casa entrando, otra vez más, sin llamar y sin avisarnos. Nos preparó la factura y, otra vez, sin nuestro consentimiento y sin decirnos nada, volvió a cargar en la tarjeta de crédito 180 €, alegando que era