Usuario invitado
9 de octubre de 2024
Una fonda llevada por una persona que sabe cuidar el negocio. Se preocupa de contactar contigo antes de llegar. Habitación correcta, con zonas comunes y terraza y ese silencio del que presume el pueblo de Ulldemolins. El desayuno responde a las espectativas, producto local, embutidos, tostadas con mermeladas caseras excelentes. Sirven el café y la leche en botellas de vidrio donde no se enfrían y hasta el último sorbo te lo tomas a una temperatura ideal. El trato es familiar y muy agradable. Una buena elección para recorrer la parte N. del Montsant, las ermitas, y visitar Cornudella, Prades y demás pueblos del Priorat.