Paguro Beach Inn

Experiencia inolvidable en Maldivas! He estado alojada 14 días en Paguro Beach Inn en la isla de Ukulhas en Maldivas, y creo que nunca habría podido elegir un sitio mejor para alojarme. Solaman, Faruq, Alim, y todos los demás sonrientes trabajadores son un equipo genial, una pequeña familia que hacían que te sintieras parte de ellos. Ya antes de ir, para hacer la reserva y estar informada de transfer y cambios de moneda, estuve en contacto por whatsapp con Solaman y fue encantador y siempre dispuesto a ayudar. Mejor hacer la reserva con él a través de whatsapp que a través de plataformas. Vinieron a buscarme al puerto en un motocarro, que junto con la moto, son los medios de transporte de la isla, y al llegar a las instalaciones ya tenían preparado un cóctel riquísimo de bienvenida (sin alcohol, claro). El hotel es pequeñito y está todo cuidado al detalle. En las zonas comunes tenemos el comedor donde las comidas son tipo buffet o si prefieres puedes elegir carta, y una zona de sofás donde puedes sentarte a tomar algo o a oír las información de excursiones y demás por parte del personal. En la entrada hay una manguera con grifo para lavarte los pies antes de entrar (ya que toda la isla es de arena) y en las habitaciones hay que entrar descalzo (no sé si obligatorio pero es la costumbre al menos, y donde fuere haz lo que vieres). En las tiendas u otros establecimientos también se entra descalzo. De hecho en todas las casas, hoteles, tiendas...siempre hay chanclas en la puerta. La comida muy rica, aunque poco variada ya que la comida allí o es pescado o pollo, acompañado de arroz o pasta. A destacar las chapatis, el mas huni, las papadam, el pollo tikka masala, y otras cosas típicas de allí provenientes de sitios como India o Sri Lanka. Eso sí, todo picante o todo muy dulce. A mi me encanta, pero hay que tener el estómago a prueba de bombas! Tienen una política medioambiental sostenible en toda la isla por lo que te daban botellas de agua de cristal rellenable, que cuando acabas dejas en la puerta de la habitación y te traen nuevas, al igual que las toallas. Está a un minuto escaso de la playa, con 2 accesos posibles. Para mi gusto para bañarse es mejor la zona saliendo a la derecha ya que la arena no tiene tantos trozos de coral y no hace daño, si bien la puesta de sol si vas a la zona saliendo a la izquierda, te quita el sentido. Toda la playa tiene dispersas hamacas y sombrillas que ponen los hoteles, que si vas prontito coges seguro, aunque algunas están un poco deterioradas. Resulta curioso escuchar mientras estás en la playa, las llamadas al rezo que se oyen desde toda la isla. Algo nuevo para mi y que me pareció relajante. Yo me llevé mi equipo, pero el hotel te provee de equipo de snorkel y toallas para la playa y excursiones. La habitacion muy bien, tamaño perfecto, con balconcito con mesa y sillas, aire acondicionado, caja fuerte gratuita y nevera. Importante destacar que hay 4 enchufes universales en la habitación y uno también univers