DAnna
20 de abril de 2022
El hotel está situado cerca del consulado (este es el motivo de la visita) y en general tiene una ubicación muy conveniente en el mismo centro. Dentro del hotel hay un salón con sofás y sillones para los que esperan/descansan, todo parece bonito. Para ser honesto, no pensé mucho en eso, estaba muy cansado. En la recepción me habló de su reserva y me entregó su pasaporte. Recepcionistas muy amables y sonrientes. Me procesaron rápidamente y me instalaron en el sexto piso, en la habitación 607. No esperaba ver una cama grande en una habitación individual, fue muy agradable. Todo estaba casi limpio (encontré basura debajo de la mesa), pero en general todo estuvo bien. La habitación es pequeña, ¡pero suficiente para una persona! La vista desde la ventana es sólo el tejado y la casa, no se ven calles. Todo lo que necesitaba estaba ahí, menos una botella de agua, tenía que ir a la tienda (pero lo más probable es que hubiera podido llamar y me la hubieran traído) había varias bolsitas de té y café con crema sobre la mesa. Los electrodomésticos incluyen aire acondicionado, hervidor de agua, frigorífico y secador de pelo. La audibilidad es alta, siempre había algunos sonidos, como si la limpieza continuara sin cesar o yo viviera al lado del lavadero 😅 Verás la vista de la habitación en la foto. El desayuno no me interesó especialmente, ya que por la mañana sólo como fruta, pero aun así miré allí. Desayuno típico típico: quesos, huevos revueltos, salchichas, aceitunas, verduras, hierbas y algunos pasteles. Café instantáneo y bolsitas de té. No había ninguna fruta 😒 Estaba molesta. Bueno, en general lo califiqué con 3+, casi 4. Volveré a Trabzon, lo más probable es que también me quede allí.
Texto originalTraducción facilitada por Google