Apartamentos Proamar

Mi experiencia en estos apartamentos ha sido pésima. Hice la reserva en ***********, y cuando llegué para hacer el check in, la señora que me atiende me dice que no le consta mi nombre por ningún lado. Le enseño la confirmación de reserva, y tras hacer una llamada al propietario, me lanza dos llaves como si me estuviera haciendo un favor y sin ni siquiera pedir disculpas por el malentendido. Subo al apartamento con prisas porque mi hija cogía un autobús una hora más tarde, y veo que no hay ni papel higiénico ni jabón en el baño. Nos vamos a comer y cuando vuelvo al apartamento, ya tarde, veo que tampoco hay luz en la cocina, con lo que llamo al propietario para que me solucione el problema. En ese mismo momento le explico que ni hay papel higiénico, ni secador de pelo, ni jabón de manos, ni estropajo ni balleta, y que es imposible poner la lavadora porque la rueda no marca el programa que quieres seleccionar al no tener ninguna muesca ni señal que indique qué programa has puesto. Se disculpa diciendo que debería haber papel, y que respecto a la lavadora no puede ayudarme porque cada apartamento tiene una diferente y que no me sabe decir. Por suerte me envía un electricista muy amable que me arregla dos fluorescentes fundidos, pero al día siguiente sigo sin todo lo mencionado anteriormente. Compruebo además que la Campana extractora no funciona. A una hora de hacer el check out, le mando un mensaje por privado dándole mis quejas, y aún estoy esperando que me responda y se disculpe. Yo ni volveré ni lo recomiendo. Prefiero pagar un poco más y no tener que ir a un supermercado (eso si tienes suerte que que estén abiertos) de prisa y corriendo, cuando uno lo que quiere al llegar al destino es descansar y sentirse a gusto. Por cierto, la almohada incomodisima.