Grand Casa Naranjos, Hospedaje Alteño

La amabilidad y el trato del personal, nos hicieron disfrutar la estancia.

Este fin de semana sumamos un Hotel más siendo Grand Casa de los Naranjos el número 27, ya solo nos faltan 12 hoteles para cumplir nuestra meta, recorrerlos todos ha sido toda una aventura ya que hemos visitado algunos que ya no pertenecen a la asociación y se han sumado algunos otros hermosísimos. Para pernoctar en esta hermosa Casa que se encuentra muy cerca del Centro, preparamos un itinerario de dos días para comer y descansar este municipio de Jalisco que se encuentra tan solo 1h 6 min (77.3Km), el paisaje divino, por las lluvias luce todo verde, la caseta cuesta $190 pesos y al llegar podrás ver la oferta de pajaretes, vacas y gallinas, pues uno de los fuertes de los Altos es la producción de huevo. Vivir la experiencia de dormir en esta antigua Casona de los Altos es transportarte tal vez a tu niñez, donde visitabas la casa de los abuelos y te encontrabas con muchas plantitas, la jaula con los pajaritos los cuales no dejan de cantar, las carpetas tejidas a gancho decorando los sillones y debajo de los cristales de cada mesa, infinidad de piezas de porcelana, fotografías en la pared, servilletas para las tortillas con punto de cruz, platos pintados con paisajes, candelabros y ese peculiar olor a objetos antiquísimos. Alejandro nos recibió con una gran calidez como siempre, nos dio un tour por cada uno de los rincones y nos puso en contexto sobre la gran labor que tiene este lugar, antes que nada nos dijo que era nuestra Casa y así nos lo hizo sentir desde la entrada, tienen una biblioteca con muchos elementos decorativos de hace muchos años, como una televisión de los años 40´, grabadoras de casettes, un conmutador y objetos muy valiosos por su historia, revistas y libros informativos sobre la época de los Cristeros, tiene una cava increíble, “Cava Cristera”, se construyó justamente en un espacio que según los nietos de quienes vivieron aquí nunca supieron de este espacio, suponiendo fuera un escondite para mantenerse a salvo, en esta época también había túneles que eran usados por los cristeros para ir de casas a las iglesias, tequilas 100% alteños, centro de Negocios para cumplir las necesidades ejecutivas. El hotel cuenta con nueve habitaciones que llevan nombre de apellidos, a nosotros nos asignaron la habitación Gutiérrez, una habitación cómoda, con una colcha blanca muy bella con sutiles bordados en todo rosa, tres ventanas con diferentes vistas, un alto ropero de madera, televisión, wifi, baño amplio y con olor a limpio, me encantó, a Tita la habitación Franco. Su arquitectura es de estilo conventual, desde afuera puedes ver esta enorme casa con fachada a doble altura color amarillo con los contornos blancos, dos ventanas rectangulares de madera con herrería negra y contornos color verde seco, numerada con el #105 de la calle Pedro Medina, la puerta de entrada al centro cubierta por un toldo del mismo todo verde que los contornos y un letrero blanco que anuncia que este es el Hotel Grand Casa Naranjos. En el segundo nivel

Excelente!