Usuario invitado
18 de noviembre de 2024
Probablemente el hotel haya tenido mejores días hace 30 o 40 años, pero ahora mismo probablemente debería ser derribado y reconstruido. Aparte del olor a viejo que viene de todas partes (especialmente de las alfombras), las paredes de la habitación tienen manchas de moho, grietas o pintura rota; hay rincones muy polvorientos con algunas cosas raras, instalaciones viejas y rotas (¿para qué hay un televisor de 40 años en la habitación si no se puede conectar a nada?), enchufes y cables inestables y que no funcionan, no hay cortina de ducha, no hay alfombra de baño, no hay wifi, no hay artículos de tocador (¡ni siquiera jabón de manos!). No vale la pena pagar tanto, hasta el punto de que ni siquiera querría quedarme allí gratis.
Texto originalTraducción facilitada por Google