Usuario invitado
2 de enero de 2023
La comida es buena pero cara que en otros restaurantes locales. Sin embargo, vale la pena, porque puedes sentarte al lado del mar, la laguna y el manglar. Los corales y el agua están muy cerca y son hermosos, también puedes ver tiburones bebés justo en frente de tu habitación (mi número de habitación es el número 1). Los servicios y el mantenimiento fueron sobresalientes, aparte de la recepción, Lory, a quien parecía no importarle ayudarnos cuando nos recibió al llegar sin decirnos ninguna instalación en la isla y en el hotel, en lugar de eso, solo me dio una llave para caminar a la habitación nosotros mismos. Ella dijo que podíamos preguntarle si teníamos alguna pregunta. Pero, cuando fui al escritorio, intenté organizar una transferencia para la fecha de salida, ella nos dijo que lo discutiéramos al día siguiente. El guía de vida, Toto, que es excelente, había mostrado todo bajo el agua. La prueba de treck es de aproximadamente 30 minutos, camina por el monte hasta el banco de arena. La piscina también es un muy buen lugar para relajarse, ya que tiene una buena vista al mar.
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