BorjaViajero
6 de mayo de 2025
Estuvimos hace tiempo y nos gustó todo excepto el trato del personal de cafetería/terraza. Nos pareció muy lento atendiendo, sirviendo… en todo. Hace unos días volvimos al parador unos días y dimos una segunda oportunidad a la cafetería, pensando que lo de la otra vez podría haberse debido a mucha carga de trabajo y poco personal. El resultado no podría haber sido peor. Exceptuando a un señor con gafas y a un chico joven que nos trataron muy amablemente…el resto garrafal. Llegamos a la terraza a las 22h, no nos atendieron hasta las 22:20…y al ir a pedir algo de cenar nos dice que la cocina cierra a las 22:15 y que no podemos pedir. Todo eso entre soplidos y murmujeos consigo misma. A la noche siguiente, decidimos tomar algo dentro de la cafetería y no en la terraza para que nos atendiera otra persona. Al ir a preguntarle a la chica por un plato que tenían antes (unas empanadillas de guisado que estaban riquísimas) y esta vez no veía en la carta, me interrumpe diciéndome que ella no sabe lo que había antes porque llevaba poco tiempo. Ni se molestó en dejarme terminar la pregunta, ni en preguntar en cocina… Lo dicho, el parador muy bonito, el personal de cafetería de pena (exceptuando el señor de gafas de unos 55 años y un joven de unos 24 que fueron muy amables).