Usuario invitado
31 de enero de 2023
Hemos estado 10 días este verano en pareja en agosto en Annabelle y no podemos estar más contentos... si pudiéramos poner más puntos, se lo pondríamos, porque lo merecen. El hotel, sólo de 14 habitaciones, es una maravilla, el jardín, las vistas, la piscina, los desayunos, las cenas, las copas... pero, si hay algo que destaca sobre todo, eso es el trato y el servicio de todas y cada una de las personas que componen en el equipo... siempre están deseando ayudarte y hacerte la estancia más agradable. Y, sobre todo, Salvatore, el alma del hotel y la persona que está pendiente para que todo salga bien, cada excursión, reserva, cenas o lo que necesites. Y la encargada de la gestión de desayunos y cenas, una maravilla, siempre con recomendaciones extraordinarias. El hotel, es realmente estupendo, con habitaciones grandes, todo nuevo y unas vistas espectaculares. Además tienen un coche (un jaguar todocamino nuevo) que te baja y te sube de Sorrento en un momento. La ubicación también es perfecta para no estar agobiado en el mismo Sorrento, pero perfecto para bajar a cenar o como punto de partida de distintas excursiones (Pompeya, Herculano, Capri, costa Amalfitana...) y, además, todo te lo organizan ellos. Sin ninguna duda, repetiremos en cuanto tengamos otro huequecito...