Usuario invitado
12 de agosto de 2022
En general ha sido una estancia súper agradable. La categoría del hotel es de 5 estrellas pero lo cierto es que hay detalles que hacen que no te lo parezca y por eso no puedo puntuar un 5 (que me encantaría, ya solo por el personal que es realmente entregado y se aprecia tanta dedicación). Los puntos que mejoraría son: las toallas de la habitación no eran suavecitas al tacto como las de la piscina, los cubiertos necesitan una limpieza más exhaustiva (en concreto los tenedores), le falta algo de mantenimiento en general a todo, se ve gastado: hierros oxidados, pintura que se ha salido, malos acabados, zonas comunes algo olvidadas (pero con mucho potencial decorativo)... Respecto a la habitación que tuvimos -fue de las más sencillas del hotel-, esperaba una decoración más chic, pero lo importante es que todo funcionaba correctamente y estaba muy limpia. Me gustó mucho el detalle de las aguas de cortesía y la botella de vino dulce. La TV era algo pequeña pero tampoco le di mucha importancia porque solo daban canales en griego, por lo que se quedó apagada durante toda la estancia. Hubiera agradecido unas cortinas que no dejaran pasar la luz, incluso de noche nunca llegabas a estar totalmente a oscuras. Ninguna queja sobre la piscina, creo que es el punto fuerte del hotel: nunca está abarrotada de clientes, ponen música agradable, las tumbonas son muy cómodas, la limpian a primera hora de la mañana... Eché en falta una carta de bebidas y cócteles visible, seguramente me hubiera animado a consumir más si la hubiera habido. En cuanto al servicio de desayuno no está mal, ya que todo lo que ofrecen es muy bueno (en especial la bollería, está espectacular), pero pasamos 4 días y se nos hizo algo monótono, esperaba más variedad, siempre es lo mismo. Lo mejor del desayuno sin ninguna duda el chico encargado de él; siempre atento a si faltaba algo ir corriendo a cocina para reponerlo, atendía tus peticiones particulares... un encanto de persona y muy profesional. Como ya he comentado al principio, me ha enamorado el personal en general: recepcionistas, camareros, barman... Hacen su trabajo con mucho cariño y es algo a destacar y valorar.