Sandos El Greco

El servicio muy atento y muy agradable. Las instalaciones perfectas. La comida estupenda. Recomiendo por un poco más la pulsera naranja, que te permite acceder a la zona de tumbonas al lado de la playa.

¡Una estancia simplemente excepcional en el Sandos El Greco! 🌟✨ Desde nuestra llegada, nos envolvió una atmósfera de amabilidad, profesionalismo y atención genuina. Un enorme gracias de todo corazón al equipo de recepción, que encarna a la perfección el arte de la hospitalidad: cada persona es de una amabilidad poco común, siempre atenta, disponible y con una sonrisa sincera. Uno se siente bienvenido desde el primer momento, casi como en casa. Queremos también expresar nuestro profundo agradecimiento a todo el personal de los bares y del restaurante, por su servicio impecable, su eficacia, su constante cordialidad y su alegría contagiosa. Cada comida y cada pausa refrescante se volvieron especiales gracias a su dedicación y profesionalismo. Un agradecimiento muy especial para Iván, del snack bar, un joven verdaderamente extraordinario. Iván representa todo lo que debe ser la buena atención: respetuoso, atento, sonriente, muy profesional, sabe ponerse en el lugar del cliente y comprende perfectamente sus necesidades. Sus snacks no solo son deliciosos, sino que también están preparados y servidos con un toque de humanidad y generosidad que los hace inolvidables. ¡Un verdadero tesoro para el hotel! Y por supuesto, no podemos olvidar a las maravillosas señoras de la limpieza, quienes, de forma discreta pero incansable, hacen un trabajo admirable. Cada día encontrábamos nuestra habitación impecable, con una limpieza impecable, y eso merece toda nuestra admiración. Su trabajo silencioso, meticuloso y constante fue clave para nuestro confort y bienestar. Gracias a cada uno de ustedes, porque son los verdaderos artífices de la magia del Sandos El Greco. Gracias a ustedes, nuestra estancia fue mucho más que unas simples vacaciones: fue un paréntesis de felicidad, paz y calidez humana. Nos vamos con el corazón lleno de gratitud… ¡y con muchas ganas de volver lo antes posible!

Un acierto, no hagáis caso a las malas críticas. Acabamos de volver de una semana en este hotel, tengo que destacar el trato espectacular por parte de Arianna en recepción, la estancia ha superado nuestras expectativas. Los chicos de animación unos currantes, super atentos (Ana y Dani). Por otra parte cabe destacar la comida, mis felicitaciones a los cocineros y equipo del restaurante, es cierto que el TI es algo limitado con respecto a horarios pero en general todo perfecto, todo estaba muy bien cocinado y había mucha variedad La ubicación es perfecta para desconectar, la playa del hotel es preciosa y junto a ella hay una cala muy bonita también. Las habitaciones cómodas y limpias Hay aparcamiento en la puerta del hotel, algo pequeño, y algo más arriba hay un llano, se puede solicitar la llave ( si hay huecos libres) dejando un depósito de 5€. Se pueden solicitar toallas para la piscina bajo depósito de 10€, genial para liberar espacio en el equipaje. En general, todo más que perfecto. Esperamos repetir pronto ❤️