AluaSun Doblemar

Fuimos por diez días viaje del IMSERSO ,recomiendo coger otro mas cerca sino tienes coche,,, es un hotel grande comidas normal en bufet limpieza normal pero la política no es muy normal nada mas llegar te ofrecen por 40 euros estés los días que estés vistas al mar menor pero la trampa es que te las dan laterales no ves nunca el sol y el mar de lado o sino te dan mirando al parking y a la piscina por tanto es mejor mirando a la carretera que ves el mar Mediterráneo estás te las asignan por defecto si eres del IMSERSO. En resumen coge una que te asignen en planta alta todas son iguales. En recepción un señor joven MARIANO muy amablemente ante nuestra queja nos cambio al quinto día a una habitación frontal al mar menor que por lo menos nos daba el sol frente a la piscina. Con colchones mas usados y peor limpieza pero por lo menos veíamos el mar en resumen no paguéis. Cómo hizo mal tiempo es difícil caminar no hay paseo marítimo y vas por la carretera solo un pequeño bar cerca del hotel y ya esta ....y creo dos tiendas de chinos ,visitar el mercadillo de cabo de palos es muy grande y ojo no dejéis nada en el coche a la vista nos rompieron un cristal trasero en los alcázares para coger una mochila cuidado con esto . He estado en otros hoteles mejores ,yo no volvería pero bueno si es barato en verano y te puedes bañar vale la piscina muy pequeña Se puede aparcar gratis enfrente en un parking de cemento un poco antes de llegar explóralo porque esta bien no hay un bar cerca no hay paseo marítimo no hay tiendas y el fin de semanal legaron familias enteras de celebración pagas suplemento si bebes cerveza o refresco de un grifo que esta malísimo a nosotros nos ponen pulsera amarilla del inmerso agua y vino del grifo eso si el café Delta de la maquina lo mejor,, por la noche no tiene sitio para nadie el hotel en la sala de espectáculos un poco para mayores animadores ,magos un rollo es para quinientas personas en resumen yo no repito lo siento no es mal hotel pero falla algo

Lo más positivo, la cama MUY CONFORTABLE, las almohadas también. La decoración tipo mobiliario, un poquito desfasado. Lo que menos la variedad en productos de alimentación en comida y cena veganos. La verdura y vegetales, están procesados o son encurtidos.....no hay oferta para vegetales crudos.

Decepcionante. Mi habitación 408, un desastre. Los 2 colchones hundidos por el centro. He vuelto con dolor de espalda. El lavabo no tragaba bien. Moho en el plato de ducha. La ventana no encajaba bien y al hacer viento se oía mucho. Paredes entre habitaciones de papel, se oye todo de los vecinos. Las instalaciones muy bien, muchos sofás y espacios para estar. El entorno feo, todo cerrado. La comida bien en general, aunque poca variedad de fruta. Necesita una reforma profunda en las habitaciones. Por cierto, un ascensor roto 3 días.

La Manga es precioso, el hotel es bonito, pero deben mejorar en tema de gastronomia, lamentablemente la comida no cumplio mis espectativas, se que no es restaurante exclusivo pero pienso que muy mala eleccion y poco sabor en las mismas, donde hay platos basicos que son muy ricos con poco esfuerzo, el cafe de Maquina EXQUISITO, alli los felicito, y tiene bonitas instalaciones, a piscina preciosa pero por tema de clima no pudimos usar, pero no es culpa del hotel, de resto mejorando eso atraeran a mas publico y es lo que les deseo.

El hotel Aluasun Doblemar posee unas vistas magníficas al Mar Menor, tiene un buffet variado y abundante y un equipo de animación fantástico. La estancia fue muy agradable hasta que empezamos a notar picaduras durante la noche. Acudimos a recepción a comentarlo en TRES ocasiones y nos aseguraron que mirarían las camas por si había algún insecto. La última noche y, cansadas de amanecer con más picaduras cada día, levantamos las sábanas y comprobamos que había restos de sangre seca en el bordillo superior del colchón. Luego encontramos un insecto y al buscarlo en internet descubrimos que eran CHINCHES DE CAMA. El horror fue que nos las llevamos a casa y fue necesario fumigar las maletas y la ropa. Escribimos al hotel y vinieron a decirnos que las habríamos llevado nosotras, asegurando que la habitación había estado cerrada por reformas. Eso, no lo dudamos pues había restos de pintura pero lo que sí aseguramos es que el colchón tenía chinches de cama. Como solo nos queda este medio de queja, esperamos que sirva para que en ese o en cualquier otro hotel, a las primeras picaduras dejen sus quejas por escrito y exijan el cambio de habitación. Tampoco estaría de más acudir a un centro del consumidor y dejar constancia del problema.

todo bien, la comida rica y bien preparada, a pesar de que habia mucha gente no hay que esperar mucho, bien organizado, los camareros y camareras muy atentos Limpieza correcta, la animacion muy buena implicando a la gente a participar recomendable