Hotel Reina del Mar by Dorado

Después de revisar muchos lugares y comentarios para decidir dónde quedarnos en isla San Andrés, descubrimos un verdadero tesoro: el único hotel que combina comodidad y acceso directo a una de las playas más hermosas de la isla. Este lugar único es un oasis, donde se puede disfrutar de la playa sin renunciar a la comodidad de estar cerca de tu cabaña o habitación. Lo que me impresionó fue que, a diferencia de otros hoteles de la isla, como edificios con resort y piscinas incluidas, este lugar ofrece acceso directo a la playa, sin necesidad de caminar largas distancias o tomar un transporte que a la larga termina siendo caro. Las cabañas están conectadas directamente con la playa, rodeadas de palmeras y con vistas impresionantes del mar. Las cabañas están excelentemente equipadas y muy bien mantenidas, con aire acondicionado, televisión y todo lo que necesitas para sentirte como en casa. La atención al cliente es su fuerte, especialmente gracias a Angie y Fabian, que nos brindaron un servicio amable y atento. El súper cómodo poder estar sentado en la playa en esos maravillosos sillones y camas de uso exclusivo entre palmeras y poder pedir cócteles tan ricos y a precio tan accesibles a solo metros de tu cabaña. La comida también es un punto fuerte del hotel, con opciones deliciosas como la langosta, la mojarra, la parrillada de mariscos y la cazuela de mariscos, que fue mi plato favorito. Aunque también sirven pizzas hamburguesas y carnes. Los desayunos también fueron contundentes, con seis variedades para elegir, todas ellas deliciosas. El hotel también tiene la opción de que coordines los tours directamente con Doris, siendo mucho más fácil llegar desde el mismo hotel al acuario por ejemplo sin tener que pasar por el muelle de la ciudad. En resumen, este hotel es el único lugar en la isla San Andrés que combina comodidad y acceso directo a la playa. Es un verdadero tesoro. Si vuelvo a San Andrés y después de todo lo que recorrí y conocí no tengo por dónde perderme. Me vuelvo a quedar acá definitivamente. 100% recomendado.

Maravillosa locación. El lugar perfecto para perderse en el mar azul. Las habitaciones son pequeñas PERO se entiende que uno va a estar casi todo el día afuera, es lo normal. El detalle es que cuando llueve y uno DEBE estar en el cuarto se siente algo de claustrofobia. El staff muy atento a las peticiones. Y siendo miembro GOLD de ******* nos regalaron una botella de vino. Todo un placer! El desayuno muy rico, fresco y completo. Volveremos!

Un lugar excepcional!! Súper recomendado, excelente atención, comida muy rica, las instalaciones muy bonitas y todo muy limpio y ordenado . El mejor ambiente para relajarse y pasar unos días muy tranquilos y en un lugar de en sueño, 10/10!

Buenos dias ,muy bonita la experiencia, la playa y la estadía super relajante, la comida, los tragos, el lugar y los tours fueron increibles, aprendimos y conocimos bastantes paisajes de San Andres y sus islas, de todas maneras volveremos de nuevo.

Literalmente estas en la playa de San Luis, debes bajar del porche de tu habitación para ya sentir la arena. Pase cinco noches con mi pareja, nuestra idea de viaje fue encontrar un lugar para descansar donde no tuvieramos que movernos demasiado para estar en la playa y pasar tiempo juntos. Este Hotel lo logró a la perfección. Todos sus empleados son muy diligentes y estan para ayudarte a lograr que tu estdía sea lo más placentera posible. Por la epoca del año que fuimos tuvimos algunos días de lluvia, sin embargo, al poco rato se despejó. Las habitaciones on muy limpias y comodas, el aire acondicionado funciona a la perfección, debes tener encuenta que son habitciones pequeñas y ajustadas con diseño minimalista. La ducha es muy reducida, solo logra bañarse una persona a la vez y de talla normal, si eres muy alto o voluminoso tendrás problema al usarla. Para pocos días el menu del restaurante esta muy bien, para nosotros que pasamos 5 noches, ya nos faltaron opciones y un par de veces salimos a comer fuera. Lo recomiendo ampliamente y volveré!

Si quieren descansar y desconectarse, este es el lugar. Las habitaciones son sobre la arena, a pocos pasos del mar. La playa es limpia, segura. La comida y los cocteles son muy buenos; la atención del personal, también. Las habitaciones son pequeñas, pero suficientes. Es un lugar alejado del centro, pero con facilidades para adquirir planes turísticos. En carro son 20 minutos desde el aeropuerto.