Usuario invitado
30 de julio de 2024
Hotel de 4 estrellas que las tienen por que las habrán pagado por que a la hora de la verdad no les doy ni dos. Para subir a mi habitación tienes que ir sin prisas por qué los ascensores van a su ritmo así como el personal. Habitaciones sucias e incómodas, reservamos una para tres adultos que decidieron que teníamos que compartir toallas por qué no nos dejaron para las 3. Llegamos un día a las 20:00h después de pasar el día entero fuera y nuestra sorpresa fue que no teníamos la habitación limpia, bajamos a recepción para pedir explicaciones y las chicas que nos atendieron fueron desagradables y su única respuesta fue que no podían meter prisa al personal de limpieza decidimos ponerles una hoja de reclamaciones la cual nos dieron de mala gana y con mucha borderia. En general personal con un ritmo muy caribeño, ganas de trabajar no tenían ninguna. Desayuno con buffet bastante normalito y con personal dando vueltas sin saber muy bien qué hacer. A la piscina o bajas a primera hora o te tendrás que olvidar de tener hueco para tumbarte un rato. Si quieres tener intimidad olvídate por qué te van a escuchar hasta si estás meando, las paredes son de papel. Lo único bueno a destacar es la ubicación, que si eres deportista de élite tienes la playa a 50m y podrás bajar por esas escaleras del infierno a la playa. Puedo continuar con el parking, que a parte de no estar bien señalizado para poder entrar, nos indicaron que no íbamos a poder acceder ya que estaba completo, les pedimos información de donde podemos aparcar y nos indicaron un parking que nos pillaba a media hora andando. Las instalaciones son pésimas nada que ver con un hotel de 4 estrellas. No volveremos.