ExploreWithMo
5 de mayo de 2025
La ubicación es su principal atractivo: a 7 minutos en coche del aeropuerto y a 1 minuto a pie de la frontera entre Francia y Suiza. La parada de autobús está justo enfrente del alojamiento y la de tranvía a solo 4 minutos. El apartamento está bien, aunque es básico. Es un poco antiguo, pero está bien cuidado, aunque le vendrían bien algunas reformas, sobre todo la moqueta. Percibí un olor raro al entrar en la habitación (creo que es de la moqueta). El servicio es fantástico; el personal siempre te atiende con una sonrisa. Hay piscina privada. Hay una pequeña cocina en la habitación con algunos utensilios básicos (nevera, hervidor, ollas, platos, microondas, cubiertos, cocina de inducción y aire acondicionado), aunque no pude utilizarlos. La habitación es espaciosa, pero el baño es pequeño. La limpieza podría mejorarse: encontré algunos pelos en el suelo, polvo y manchas en la silla y en la barrera de la puerta trasera/balcón. Me gusta que la puerta principal siempre esté cerrada y que te den un código para abrirla desde afuera; te sientes seguro. Hay alguien en recepción las 24 horas. Hay un restaurante justo enfrente del hotel; cené allí mi primera noche; no está mal y el precio es razonable. Hay más cafeterías, tiendas y restaurantes calle abajo, a unos 3 o 4 minutos a pie. La recepcionista me ayudó a pedir un taxi al aeropuerto. Hay una toalla y una esponja nuevas en la cocina. En general, no está mal y el precio es razonable.
Texto originalTraducción facilitada por Google