Usuario invitado
14 de octubre de 2023
Para llegar al hotel tienes que subir por unas calles con bastante pendiente, pero la vista desde las habitaciones merece la pena. Las habitaciones son espaciosas, tienen balcón que da a la piscina y a la bahía de Roses. El bañó está bien equipado. No se ven antiguas. Me parecieron la mar de bien (vi la mía y las de mis amigas). No nos quedamos a comer, así que de eso no puedo opinar. La zona de la piscina es tranquila y bonita. Creo que el hotel en general es recomendable pero el personal no es amable. No es solo una persona, sino que desde la camarera del desayuno hasta la chica de recepción te miran con cara de que te están haciendo un favor o perdonando la vida. Pero la peor fue la señora de la limpieza. Eran las 11:55, llamó a la puerta y nos dijo de muy malas maneras que a las 12 teníamos que estar fuera. A una amiga le entró en el baño cuando ella estaba dentro. NO eran las 12. Entiendo que sin son las 12, o las 12:10 o 12:15, nos metas prisa (siempre amablemente), pero no antes. Fue muy desagradable y nos fuimos con mal sabor de boca. Una lástima.