viclife
3 de septiembre de 2024
Todo un descubrimiento en Cantabria. Situado el hotel en una casa espectacular, en un pueblo y entorno entrañable, con mucho encanto y en el centro de todas las excursiones que hemos hecho. Además, es un auténtico remanso de tranquilidad. La atención de todo el personal del hotel, inmejorable, con una paciencia infinita para contarnos todos aquellos sitios maravillosos de Cantabria que deberíamos conocer. Y las instalaciones del hotel, espectaculares, tanto por el continente (la casona por fuera es muy bonita), como en el contenido. Las zonas comunes como la zona de recepción y el comedor y el salón superior, son muy bonitos. Los desayunos, muy buenos, con productos de calidad y muy caseros. Y las habitaciones, también muy cómodas y bonitas. Únicamente, y como aspecto a mejorar, la iluminación del espejo del cuarto de baño, que a mi modo de ver no es suficiente. Aunque esto no empaña lo contentos que estamos con nuestra estancia. Muy agradecidos, de verdad!!!! Volveremos!!!!