Student's Hostel della Ghiara

Diré esto en inglés porque no tengo las palabras en italiano para describir lo ofendido que me sentí como estudiante al quedarme aquí durante mis estudios en el extranjero en Reggio. ¿Este lugar es bueno si necesitas quedarte una noche? Claro, pero por más tiempo como extranjero no te sientes bienvenido y, a pesar de que apenas proporcionas los servicios básicos del albergue, el personal te trata como una molestia. A pesar de que nuestra universidad nos dijo que este es un albergue de estudiantes, todos los que se quedan aquí parecen ser residentes permanentes, generalmente hombres solteros de 30 a 60 años. Es una mentira absoluta que este es un lugar seguro para las mujeres. Mi viaje tuvo alrededor de 20 niñas, todas de entre 18 y 21 años, y hubo incidentes casi semanales en los que otros invitados masculinos se comportaban de manera inapropiada con ellas, incluido ir a los baños de mujeres mientras había mujeres presentes. No estoy seguro de si esto es solo una costumbre en los EE. UU. en residencias temporales, pero el personal de limpieza irrumpía en mi habitación por la mañana porque no estaba bien cubierto porque parecía que no podían esperar para cambiar sábanas, toallas, etc. Tal vez eso es normal aquí en Italia, pero como extranjero me hizo sentir incómodo y una vez más me hablaron mal por estar en mi propia habitación. Hubo una plétora de otros problemas que sucedieron mientras estuve aquí, pero mi experiencia aquí en el albergue ha convertido a Italia en el primer país en el que he estado en Europa del que me voy con mal sabor de boca. Si eres un extranjero de vacaciones o estudiando en Italia, te recomiendo encarecidamente que busques otro lugar para quedarte.

Sono piuttosto abituata a dormire in ostelli in Italia e all'estero. Il prezzo è decisamente alto rispetto ai servizi scadenti. Il letto matrimoniale sfondato al centro. Il letto singolo con qualche mollone affiorante. Mobilio quasi completamente rotto. Asciugamani non compresi. Un bagno uomini e uno donne per un numero esagerato di persone se l'ostello è pieno( fino a 40). Colazione anch'essa decisamente scadente e scarna. Poi i cornetti secchi e vecchi serviti a richiesta sono stati il top. In conclusione gestione decisamente scarsa. Peccato perché potrebbe essere un bellissimo posto di accoglienza per giovani e famiglie, perché collocato in un suggestivo ex convento in pieno centro storico.

L ostello è economico e il personale ( gli uomini) disponibile e simpatico. L ambiente e splendido ma si potrebbe fare di più in quanto a pulizia dei bagni ( e aggiungere almeno una toilette! 4 toilette e due docce per 10 camere ognuna da 2 a 8 ospiti e poco). Cucina ottima. Colazione così così. Se si ha un buono spirito di adattamento è una bella soluzione!