Cecilia E
16 de diciembre de 2024
El personal fue muy amable al llegar. La mayoría hablaba italiano o inglés! Arregle el traslado del aeropuerto con el hotel, el conductor era súper amable aunque no hablaba inglés fluidamente se hacía entender muy bien! Al llegar al hotel nos cobraron €40 el viaje de ida y vuelta al aeropuerto, aunque apenas habíamos llegado y no habíamos nisiquiera hecho el check in, por ende no teníamos aún número de habitación, que luego el día de irnos fue un problema ya que no encontraban en sus recibos nuestro recibo de pago (nuestra copia la tiramos a la basura creyendo que era otro recibo y obviamente fue un problema) al no encontrar nuestra reserva querían cobraron nuevamente, esto no ocurrió ya que nos opusimos totalmente, después de algún intercambio de palabras en un tono contundente nos dieron la razón y nos condujeron hacia el aeropuerto. Esta fue la única cosa que fue negativa en nuestra estadía, por ende evitaría los traslados con los taxis del hotel son excesivamente caros! Tienen shuttles pero no los ofrecen siempre. En general la comida era buena y había variedad, pero con el temor de como habían lavado los alimentos y que agua habían utilizado, nos acotamos a comer cosas “seguras”, al menos así lo hizo mi marido, y yo los últimos días fui más intrépida y me animé a comer diferentes cosas, con bastante éxito diría. Las habitaciones son un poco antiguas, pero cumplen su función! A pasos del mar y de las piletas, fuimos en un periodo que no era tan cálido, recomiendo llevarse siempre ropa de otoño para la noche. El chico de limpieza, Samaan, nos dejaba siempre algún muñeco de tohalla! Fue siempre muy amable! En general fue una grata experiencia! Volveria pero tal vez al Charmillion Club Resort