Bakour Punta Cana Suites

Estuvimos hospedados en el hotel Bakour y nuestra experiencia fue absolutamente excepcional. Desde el momento en que llegamos, el personal nos hizo sentir como en casa. La atención fue de alta calidad, familiar y extremadamente atenta. Siempre estuvieron dispuestos a ayudarnos con cualquier cosa que necesitáramos. La recepción fue especialmente destacada, gracias a la amabilidad y eficiencia de Kimberly, quien nos saludaba todos los días y nos mantenía informados sobre las actividades del hotel. Su atención personalizada y su disposición a ayudarnos en cualquier momento fueron fundamentales para nuestra estancia. Pero lo que realmente nos enamoró fue la actitud del personal en general. Desde Manuel, el vendedor de tours que se convirtió en un amigo y nos hizo varios obsequios sin compromiso, hasta los chicos del bar y el buffet, como Jazmín y Joan, que siempre estuvieron atentos y amables. Incluso Junior, que trabajaba por las noches, fue extremadamente sociable y nos hizo sentir parte de la familia. Celebramos mi cumpleaños número 27 en el restaurante japonés del hotel y el equipo nos preparó un festejo inolvidable. Nos dejaron un pastel y una botella de Aperol en la habitación antes de la celebración, lo que nos hizo sentir muy especiales. Aunque la playa no estaba en su mejor momento, la estadía en general fue excelente gracias al personal. Todos y cada uno de ellos se preocuparon por nuestra comodidad y felicidad, y eso es algo que no se puede medir solo con estrellas. En resumen, el hotel Bakour se merece las 5 estrellas con creces. El personal es extremadamente atento y se preocupa genuinamente por la experiencia de los huéspedes. Si buscas un lugar donde sentirte como en casa y ser tratado como parte de la familia, este es el hotel perfecto para ti.

Agua fría... Y no me lo resolvieron