Hotel del Prado

¡El mejor hotel en Puigerdà! Familiar y acogedor. Rodeado de una gran zona ajardinada, ofrece Spa y piscina Su privilegiada ubicación permite a los clientes realizar todo tipo de actividades lúdicas: rutas de senderismo, BTT, esquí, y descubrir la autenticidad de los pueblos y el entorno natural de la Cerdanya Montse, la directora, fue súper amable, ¡tuvimos muy buena conexión con ella!  Desde el principio nos sentimos como en casa. El hotel es genial!  muy bien decorado. Especialmente ahora en navidad, lleno de detalles Las habitaciones son comodísimas y calentitas, el baño estaba muy limpio y espacioso con todo lo que necesitamos ducha, toallas, gel, champú, secador... ¡El desayuno buffet fue increíble!   zumos fruta fresca, cereales, quesos, jamón  Deliciosa panadería y todo tipo de panes.  ¡Realmente hemos disfrutado el desayuno!  Café, té y chocolate con leche, ¡muy buen café!  ¡El mejor desayuno que hemos probado jamás!  Mucha energía para iniciar cargar pilas en nuestro día de sku Todo el personal fue super amable. Iván y Magali me contestaron al teléfono y su actitud es excepcional, todo nos lo pusieron muy fácil  ¡Fue una estancia corta pero intensa!  ¡Tenemos que volver, seguro! ¡Definitivamente hotel el Prado es un paraíso en Puigerda! Mil gracias por la experiencia

Hotel correcto , necesita actualizar algunas cosas , yo tuve la mala suerte de tener goteras en la habitación y la cerradura de la puerta no funcionaba correctamente, pero repito es un hotel correcto .El personal correcto también .tiene parking gratuito

No tuvimos oportunidad de conocer el alojamiento. Utilizamos los servicios de hosteleria que ofrece. Fuimos un grupo de casi 46 personas adultas, que habíamos contratado el servicio de hosteleria con antelación. Recibimos un trato excelente, puntual y exactamente según lo acordado. Altamente recomendable. Si se encuentra en la zona, considere la opción de este establecimiento. Las instalaciones de recepción, bar, restaurant y salón, son acogedoras y muy cuidadas.

Estuvimos comiendo 7 personas. Mi yerno es alérgico al marisco. Había dos tipos de paella: a la carta y en el menú. Dijo al Maitre su alergia y le contestó que no le podía garantizar que en la paella hubiera restos de marisco en el caldo. Lo dijo con malos modos. Después vino otro empleado y le dijo que no habría trazas de marisco. La pidió pero estaba totalmente pasada de cocción: estaba caldosa y los granos de arroz super cocidos. Lo mismo me pasó a mi con la paella del menú que pedí. MUY MALAS PAELLAS EN AMBOS CASOS

Estuvimos 4 personas en este hotel 4 noches. Quiero destacar la amabilidad del personal, la limpieza y la gastronomía. La calidad del restaurante está asegurada. La limpieza es exhaustiva. El trato y detalles de todo tipo, del personal es mucho más que familiar.

Vinimos con nuestro perro para un fin de semana con un cofre regalo. La habitación que nos dieron era pequeña, sin apenas ventilación ni luz. Solo tenia una claraboya en el techo la cual para poder abrirla teníamos que subirnos a un taburete. La experiencia en el restaurante un desastre, la comida sosa y el personal (excepto alguno) prepotente. La piscina climatizada estaba fría por lo que estando a 4 grados ni nos metimos. No recomendaría esta experiencia para nada.