Rincon Escondido B&b

Teníamos la reserva de este hotel de hacia tiempo y faltando tres días para ir a Puebla de Iguazú y estando en de vacaciones en Santiago de Chile recibimos un wuatsspp de Pablo el propietario para comprovar nuestra llegada y ver en que nos podia ayudar en algo ,como así fue,.Llegamos al hotel y una vez que nos paso a nuestra habitacion (Las Dominguez) nos comento que nos esperaria en un salon social que también se usa para desayunar, para describir todo lo relacionado con las instalaciones y con Pueblo de Iguazú (sus esplicaciones nos fueron de ayuda ) Tanto nuestra habitacion (que necesita unos pequeños retoques )como el recinto esta bien conjugado con sus diferentes habitaciones el subsodicho salon-comedor (donde hay una pequeña cocina ) que Pablo permite "USAR " en momentos o horas que no hay nadie y apetece algo de fruta ó algún tipo de bebida (agua ,cerveza) también una pequeña piscina y enfrente un tipo invernadero semi habierto ,con un piano unos divanes y unos sillones perfectamente combinados ,se ve que todo a sido espléndidamente armonizado para pasar una estancia agradable ,Desayuno adecuado , Nuestra estancia en el Rincon Escondido fue Placentera

¡Muy lindo hotel! hotel. Las habitaciones son muy cómodas. Cerca del centro pero en un lugar tranquilo. Se puede utilizar la cocina y los utensillos. Excelente atención del dueño Pablo. Sin duda, volveria.

En Puerto Iguazú, nos hospedamos dos noches en este hermoso hospedaje B&B. Ha sido una de las experiencias más maravillosas que hemos tenido. Pablo ha sido un excelente anfitrión. Su amabilidad y sus buenos consejos fueron fundamentales para que podamos conocer todo lo que hay que conocer (en solo dos días) en Iguazú. Sobre la casona, es hermosa. Todos los detalles son encantadores. Las habitaciones son de una calidad sublime. El desayuno es muy bueno.

Posada boutique exquisitamente decorada. Son pocas habitaciones con hermosos detalles, todas ubicadas alrededor de un hermoso y selvático parque con piscina. Cuenta con espacios comunes tales como comedor y quincho ambientado como salón de invierno. Los desayunos son muy ricos y los hace el propio anfitrión. El establecimiento se encuentra en un lugar tranquilo y pintoresco de cercanía al río.

Fue una verdadera experiencia de principio a fin, nos quedamos 7 días allí y nos pareció que nos faltó tiempo. Al llegar nos recibió uno de los mejores anfitriones que conocimos en todos nuestros viajes. Su nombre es Pablo (propietario del lugar) , no solo nos abrió la puerta de lo que fue nuestro hospedaje si no que lo hizo con el tiempo y la dedicación que muy pocas personas lo hacen. Mirian (esposa de Pablo) se sumó para darnos la ayuda que necesitábamos para visitar lugares impensados en este paraíso de selva. La habitación y las comodidades de este lugar fueron hermosas y con las prestaciones de un hotel de alta categoría, el desayuno fue de los mejores no solo por sus ingredientes si no que allí estaba Pablo para sugerirnos algún buen detalle que mejoró nuestro plan del día. Realmente el lugar destaca el empeño y cariño impreso en cada detalle.

Super recomendable!!!! Un lugar muy acogedor. Cada detalle es perfecto! Nos recibio Pablo, su dueño muy cordial , amable y atento a las necesidades de sus huespedes. Lo mejor del desayuno las mermeladas de frutos tropicales caseras. El jardin, la pileta, impecable.