Usuario invitado
7 de septiembre de 2024
Reservé una habitación doble de 27 metros cuadrados y me llevé un susto al entrar, pues pensé que había entrado en la habitación de una niñera. Me dieron otra habitación, pero también era muy pequeña, de no más de 20 metros cuadrados, y el baño era completamente inaccesible. La explicación es que se trata de un edificio histórico y las habitaciones de diferentes tamaños fueron renovadas de acuerdo al edificio. El servicio de recepción fue pésimo. Dijeron que solo podían cambiar a una habitación de categoría superior por 60 euros adicionales por noche. Nos alojamos en una habitación pequeña por una noche y pudimos mudarnos a una habitación más amplia al día siguiente después de negociar. La habitación no está insonorizada en absoluto. El vecino fuma como si estuviera en tu habitación. El vecino se ducha como si estuviera en tu baño. A veces se oye el sonido del agua goteando, a veces el sonido del agua corriendo. Hay que lidiar con diferentes moscas o mosquitos cada día. El hotel está bien ubicado, pero no pueden entrar los taxis. Si lleva mucho equipaje y no quiere complicarse con las calles empedradas, el hotel ofrece taxis de pago. El restaurante de venado de este hotel es bueno.
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