Capitania Praia Hotel

Me cuesta ser crítico con el hotel porque tanto los dueños como la gerencia y los empleados trataban ser amables y respetuosos. Pero tienen una sería deficiencia en cuanto atención al cliente. Es un hotel viejo, en estado de abandono total, deprimente. Nada que ver con lo que las imágenes de su publicidad. Las canchas de tenis están totalmente arruinadas, algunas sin red directamente. Las habitaciones viejas, con olor a humedad, a tal punto que las toallas de un día a otro no se secaban, ni tampoco te reponian. No hacen limpieza de las habitaciones, ni aún cuando les mencione que se había roto un vaso y quedaron vidrios en el piso, y nosotros con una nena de 6 años. El primer día no tenían sábanas en la cama, tuvimos que pedirle 4 veces que nos den. Nadie habla español. La bañera se tapo. La TV jamás anduvo, el wifi muy malo agarraba pocas veces buena señal... La comida muy limitada, todas las cenas lo mismos 5 platos y en la zona no tenés otras opciones donde ir a cenar. Y tienen un sistema de cobranza con unas tarjetas muy confusas, nos estaban cobrando 85 reales de más al salir. No tenían frías las bebidas. Pedías una. coca y un empleado te decía que no había y otro que si...Así con todo, están en pelotas y totalmente perdidos. Los baños de la piscina tenían materia fecal en el piso desde el primer día que entramos, y en 10 días no lo limpiaron. En fin...lo único recatable del hotel es su ubicación frente al mar, sus amplias piscinas y los animales que tiene. Y que era una precio bajo en comparación a otros, pero no lo vale. AH tampoco tenian caja de seguridad, la cerradura estaba rota y por supuesto nunca se ofrecieron a repararla en nuestra estadìa.