Usuario invitado
13 de junio de 2023
Es un hotel que tuvo su momento de gloria hace mucho tiempo, ciertamente no es más un cuatro estrellas y la relación precio calidad dependerá de la oferta que el cliente obtenga. La ubicación es lejana al centro y zona de playas, unos tres kilómetros, frente al puerto deportivo. La infraestructura tiene reparaciones hechas de forma evidente y desprolija, la cabina de ducha con sistema de múltiples chorros no estaba operativo, los vidrios de los ventanales estaban sucios. Es un hotel que recibe excursiones con pensión completa y cuenta únicamente con un ascensor. El desayuno es pobre y con muy feas mermeladas de tetrapack,, en fin, abstenerse si no se encuentra una oferta de tarifa que opaque todas estas carencias. Lo único rescatable es la amabilidad de algunos miembros del personal.