Valerie_Arnauts
29 de julio de 2024
Nos acabamos de marchar de este maravilloso hotel donde desde que entres por la puerta, te sientes como en casa. Las habitaciones son muy limpias, amplias y tuvimos una vista fantástica sobre la piscina y las montañas. Destacar la amabilidad e simpatía de Loli quien a diario nos arreglaba la habitación a la perfección. La calidad del buffet es excelente, tanto el desayuno como la cena y cuenta además con una gran variedad, para todos los gustos o si vas con niños. El bar lounge hace unos cócteles muy buenos y tiene un gran equipo de camareros que siempre te sonríen, coincidí varias veces con Alex y Patrick, muy trabajadores e imposible ser más atentos y amables. Excelentes piscinas, para ser Julio no percibimos nunca que había demasiadas personas y siempre contaba con suficientes hamacas. La limpieza de piscinas es muy importante y se nota que lo consiguen a la perfección en este hotel. Por último, destacar que es imposible aburrirte aquí. Nos encantó Cynthia, tanto a mí niño que estuvo con ella en el miniclub como a mí en sus clases de yoga que eran excelentes, una chica muy profesional y cariñosa. También estuve con Roberto en sus clases de stretching y aquagym, un chico incansable que siempre sonríe. Y la petanca de Max, todo profesional, además de las risas que te echas con él. Imposible aburrirte con el equipo de Animación. También el gimnasio está genial, tienen muchas maquinas para poder hacer de todo. Volveremos el año que viene porque nos ha encantado todo y nos hemos marchado con mucha pena! Deseando volver pronto!