Usuario invitado
14 de marzo de 2024
Después de haber estado allí hace dos años, la crisis realmente ha pasado, sobre todo en materia de restauración.
El hotel acoge al 80% de los turistas alemanes que comen salchichas, tocino, huevos, judías, salsa de tomate, etc. en el desayuno y que no están presentes en el almuerzo, que se parece a una comida de cantina normal, platos constantemente reciclados, desiertos durante 15 días, siempre los mismos pasteles y tartas servidos todavía congelados. postre de crema en cantidades de 6 u 8 para 300 personas. la cena no es mejor. Realmente no recomiendo evitarlo, a menos que te guste la comida sencilla y repetitiva.
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