Juliyasha
24 de julio de 2024
El Kata Palm Resort tiene una excelente ubicación, cerca de la playa, cafés, tiendas, taxis, mercados y más. Siempre nos alojamos en este hotel durante una semana o más con nuestra familia cuando venimos a Kata. Me gusta la zona, rodeada de vegetación, la presencia de tres piscinas limpias de diferentes profundidades (una está ubicada en la azotea del edificio "azul" en el piso 6 con una excelente vista panorámica y un bar con bebidas). Los desayunos son deliciosos, definitivamente no pasarás hambre. Los trabajadores de la cocina son lentos, perezosos y no vigilan la recarga de las bandejas de comida... y los que hacen tortillas, huevos revueltos y panqueques duermen mientras trabajan. La habitación la limpiaban todos los días, reponían el agua, té, café, azúcar y minibar con bebidas, hay toallas para la playa, una sombrilla en caso de lluvia. El personal de recepción hace un buen trabajo. Es especialmente agradable ver a dos señoras con experiencia que ya nos reconocen, ya que nos hemos alojado en este hotel con nuestra familia 8 veces... los niños han crecido, pero recuerdan este hotel con calidez y ya es una buena tradición para nosotros vivir aquí. Hay una cafetería en el recinto del hotel donde se preparan deliciosos platos de cocina tailandesa y europea, hay excelentes bares en cada piscina, donde se pueden pedir diversas bebidas y postres a precios razonables. Todo estaba delicioso. También nos gustaron los servicios de masajes para adultos y niños (lista de precios aparte), la diferencia de precio con los salones de masajes fuera del hotel es de 50-100 baht. Las chicas masajistas hacen un buen trabajo. En general el hotel deja una agradable impresión, lo recomiendo.
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