The Nai Harn

No me sentía relajado. Afortunadamente, reservé dos noches y decidí cambiar de hotel. La sensación de la terraza también es muy normal. ¡No necesito demasiado sol durante el día! No se siente como un hotel debería tener, no hay una relación calidad-precio de la que hablar, no hay lugares para jugar, pertenece al estilo de alojamiento familiar, ¡no me gusta!

Reservamos una habitación con vista al mar por 5 días. Para ser honesto, la apariencia del hotel es hermosa, pero lo más desagradable es que cuando hicimos el check out, un chico gordo tailandés en la recepción nos ayudó a hacer el check out. Él preguntó que esperáramos las rondas, cuando todavía estábamos discutiendo cuándo venir a este hotel la próxima vez, se acercó y me dijo con firmeza: "Hay alguien fumando en tu habitación". Tenía una actitud firme y no quería para continuar desafiándome sobre el tema de fumar, así que volvió a la recepción y fingió estar ocupado, hablando tailandés con sus colegas mientras él estaba ocupado. Más tarde, fui a la recepción y le pedí que revisara la habitación. De acuerdo, dijo que esperara un minuto, luego, de repente, tomó el iPad y me mostró una imagen de una decoración de peces de cerámica, y dijo que la persona que revisó la habitación dijo que falta la decoración de su habitación, y esta decoración está colgando. En la pared de enfrente, hay un estante cuadrado de madera de dos pisos y un metro de altura para toallas. Le dije: "Reservamos dos habitaciones y gastamos 45.000 yuanes para tenerte. ¿El baño? Todo mi equipaje está ahora en el vestíbulo. Si quieres, te aceptaré para que revises todo nuestro equipaje, o puedes llamar a la policía. "Él ve que tengo una actitud tan dura, por lo que no puede encontrar una excusa para atacarme, no Afortunadamente, cuando nos íbamos, encontró una excusa para engañarme, él mismo entró en pánico y de repente dijo, está bien, está bien, puedes irte. Obviamente, esto se debe a que queremos que la gente pida comida, quiere engañar a la gente y tiene remordimientos de conciencia. Nos quejamos con Ctrip, pero parece un hotel extranjero y Ctrip no reservó este hotel directamente, por lo que no podemos hacer algo al respecto, pero el comportamiento de este hotel es demasiado vergonzoso. La gente es asquerosa, ¡y nunca volveré a ir a este hotel en el futuro!

Frankly, I was fascinated by this place at first view. And I fell in love with the Naiharn almost instantly. The attitude of every single guy was respect with friendliness radiating a sense of warm welcome through the genuine smile. They spoke fluent English, which made communication very easy. In addition, the hotel itself was a paradise from the design and placing of every facility to tiny touches that illuminated my stay. Everything was exquisite and perfect. Everything was somehow specially designed and fashionable even to the tiniest cushion on the sofa athesat starry lights overhead. The reflections with three burning flames on cold nights truly amazed me. As I sat on the sofa drinking a freshly made lemon soda and listened to the music flowing waves. I felt as if I was in a fantasy. What an enjoyment it was to lie back in the crystal clear water stare at the white tips of the rolling waves and feel the cool sea breeze. Afterwards I simply began sipping a cup of Fresh lemonade, took a Free towel and lay on the chairs beside the pool. Indeed, what fascinated me most was yet the breathtaking sea view that could be seen everywhere. No matter I was in my room, in COSMO by the pool, or even walking along the passageway, significant beauty of the adaman sea and Naiharn beach would always flow out before my eyes. To the left was the smooth and silky beach with comfortable benches, to the right the sea turned gradually from a shade of crystal green to light blue and turned into a deep and vivid luminous extending into the horizon. Flights below my eyes, the waves splashed and crashed onto the rocky surface awaiting the sand below, which turned the water into a sandy color. In the distance, the mountains rose above the sea and a remote island floated alone on the blue surface of the sea. Such scenery is another major reason why I have fallen deeply in love with Naiharn. The hotel offers Free towns and benches on the beach, which makes this a highly comfortable. The lifeguards were highly responsible for monitoring the waves at every moment and ensuring the safety of all tourists. A final point i'd like to make is the quality of food. Even when I randomly picked three dishes at COSMO, they relieved my taste buds, not to mention the fresh sea bass and other seafood. The breakfast was truly wonderful, especially the cool room with salad cheese, tropical food and so on. The dishes are nutritious and well balanced, providing a variety of magical experiences. All in all the Naiharn not only feel like a hotel, but also my other home in Phuket island which I would like to visit every year.

Booked this hotel without really checking on the accessibility to shopping/dining but OMG… There is no need for those extras! The views from the room, to the restaurants you dine in, they make you want to stay in and just soak it all in. The perfect place for a romantic getaway, to relax and recharge, reconnect.

The hotel is beautiful! It’s clean and modern. The location and views are stunning. I will definitely stay here again!

Wonderful in every way.