Hoteles de 2 estrellas en París

La recepción en la recepción fue informal y alegre, pero cuando mi amigo señaló que las sábanas estaban sucias y quería que las cambiaran, se enojaron. La ubicación es buena y hay restaurantes famosos y un supermercado justo enfrente del hotel, ¡así que era un hotel que me gustaría volver a utilizar!

El hotel está en una ubicación conveniente, a solo 2 minutos a pie de las paradas de metro y autobús. Hay muchos restaurantes asiáticos y tiendas de comestibles en los alrededores. El personal es amable y nos dieron una bebida de bienvenida cuando nos registramos. Las habitaciones y los baños están bastante limpios y ordenados. Mi única queja es que la cama inferior es demasiado alta para que pueda subirme, pero en realidad no es un gran problema. Creo que me alojaré aquí de nuevo en mi próximo viaje a París :)

Lo que más me ha gustado es el entorno limpio y el equipamiento ordenado. La calidad de todos los muebles, como la cama, el baño, etc., es buena. La ubicación es muy buena, con un autobús conveniente y un metro no muy lejos. La recepción es cálida y servicial también, donde puedes tomar prestado el secador de pelo. Lo único que no me gusta es la ducha, porque tienes que presionarla para que salga el agua y se detiene automáticamente.

Puedes dejar tu equipaje. Es conveniente caminar unos 6 minutos desde la estación de metro. Al lado hay un supermercado, no está mal. También hay muchos restaurantes cerca. El baño está separado del inodoro, pero el baño está mal diseñado y el agua puede fluir fácilmente hacia la habitación.

Estaba limpio pero algo alejado del centro y recepcionistas unos eran majos otros muy bordes tenía que tener suerte cuando te atendía o preguntabas algo todo era cuestión de suerte o llegar a preguntar algo y te ignoran porque andan contando su vida antes de atenderte una cosa muy ilógica pero bueno es lo que hay en ese lugar .

Durante las dos noches que estuvimos, el hotel no tenía Wi-Fi como se menciona en la plataforma. Los dos tuvimos que pagar más para usar el Wi-Fi en la cafetería de afuera. La actitud del servicio fue mediocre, pero la el precio era relativamente barato, así que tuvimos que admitirlo con una sonrisa

La ubicación es también un poco distante del centro de la ciudad. Un desayuno de cacahuete caliente y café, se elige de forma arbitraria. Luego, la fruta se añada a un pequeño pastel de pan y fruta de Huijun. Si me cuento, estoy acostumbrado a dormir en la pijama. No se atreve a dormir y luego lavar 11.30 No me dejaré lavar después de que me lave con mi compañero de habitación Los dos chicos no tienen problemas. Si los hombres y las mujeres están confundidos, las chicas deben prestar atención a la seguridad (aunque veo que las chicas extranjeras viven mucho) y lavandería y baños no son muy convenientes. En general, son baratos, pero no recomiendan verduras, todos los tipos tienen un amor

Se alojaron 3 personas para un viaje familiar. Si bien el precio es bueno, hay un mercadillo cerca, por lo que es posible que tengas que tener cuidado al moverte temprano por la noche. Aunque el baño, el baño y la habitación separados son pequeños, muchos viajeros parecen usarlos porque reducen los gastos de viaje. A altas horas de la noche, el supermercado cercano está cerrado, por lo que sólo se pueden utilizar máquinas expendedoras. La secadora te será reembolsada cuando la devuelvas con un depósito de 20€. El desayuno es sencillo y comienza a las 5 a. m. de lunes a viernes, lo que lo convierte en un buen lugar para comer antes de partir a otro destino de viaje.

Es un hotel bastante ”básico”, para dormir y poco más. Sí es reseñable la limpieza y organización del local, así como la amabilidad y simpatía con las que fuimos atendidos por los encargados de recepción. Tienen un perfecto 10!!!!! En cuanto a las instalaciones sí fue un poco problemático el tema de subir con las maletas por las escaleras: no tienen elevador, lo cual es normal al tratarse de un hotel que ya tiene sus añitos, y deberás subir por una escalera de caracol bastante pequeña. Nosotros nos alojamos en el último piso y realmente fue horrible subir todo nuestro equipaje. A la hora de bajarlos sí nos ayudó el señor de recepción... nuevamente agradecida con ellos. Por lo demás las habitaciones son pequeñas, y en la ducha del baño no hay cortinas o puertas y básicamente debes ducharte pegado a la pared, para no empapar - mucho- todo el suelo. Vamos, lo dicho... es un hotel para dormir y poco más. La verdad, creo volvería a repetir si vuelvo a estar en París para hacer turismo, pues tiene una ubicación privilegiada a un precio asequible y a pesar de sus limitantes tuvimos una buena estancia.

Si bien es un hotel algo antiguo, fue perfecto para nosotros, muy bien ubicado, con un metro en la esquina y un supermercado a un par de cuadras… Por el precio es una excelente alternativa… el único pero…es que si te tocan vecinos ruidosos puede ser algo incómodo…. Pero aún así, es un hotel al que volvería a ojos cerrados…. Por último, la atención de todos fue muy amable, y hacían esfuerzos por hablar en español…