Hotel Abelay

Estuve por trabajo el año pasado y a pesar que no es un gran hotel de una gran cadena es un hotel muy confortable. Creo que todo el hotel o al menos la parte que yo he visto esta reformada con lo que eso le da un plus de limpieza y de imagen. Es sencillo pero muy confortable. El centro histórico esta como a 15min andando, con lo que tambien tiene a su favor es esa tranquilidad de estar algo apartado. El personal siempre muy atento a las preguntas e indiocaciones y es un hotel que no está en el centro como he dicho pero es complicado aparcar en su zona. Tiene un parking de 5 plazas pero es insuficiente para todo el hotel.

Pasamos tres días alojados y lo que vivimos en este hotel nunca lo podríamos haber imaginado que pudiera ocurrir... El penúltimo día al volver por la tarde en el baño al levantar la tapa del inodoro había un excremento y no daba crédito a lo que están viendo y buscando una explicación lo primero que se me pasó por la cabeza es que alguien se había colado en la habitación. Después bajo a la recepción y el señor que había no dice palabra ni se disculpa ni envía al personal de limpieza manteniéndose indiferente. Al día siguiente la encargada que nos atiende solo nos da una forzada disculpa y mantiene una actitud sarcástica dejando a entender que lo hemos inventado todo para conseguir una indemnización cuando realmente eso lo propuso el recepcionista de la noche al cual lo desautoriza demostrando la incompetencia y descoordinación a la hora de resolver un problema, y argumenta que al reservar por Booking no es posible ninguna compensación. Esto lo comunico a Booking y al pasar una semana me dicen que el hotel no contesta a la comunicación que he habían enviado. El colmo es la respuesta a mi valoración que hice en la web de Booking en la que me contestan que no entendían que no hubiéramos solicitado que limpiarán o un cambio de habitación como si tuviéramos que hacer nosotros, los clientes, su trabajo de dar una solución al inconveniente y para colmo que nuestro propósito era conseguir ensaimadas gratis cuando fuimos nosotros los que nos negamos a que nos regalaran un par de desayunos que están pendientes de liquidar y tuvimos que insistir en que los cobraran. Me parece de poca profesionalidad y un cinismo enorme el tergiversar los hechos de esa forma y querer pasar como víctimas de unos "busca indemnizaciones", todo esto hizo terminar nuestra estancia en Mallorca con un mal sabor de boca en un hotel nada barato para no estar en el centro y con una encargada nada empática y demostrando un total desprecio a los clientes con el pobre argumento de que ponía la mano en el fuego de sus trabajadores y que lo que había pasado era imposible, pero la verdad es que ocurrió y dejando la autoría del regalito los baños no lo hicieron ese día. Muy mal

Un hotel fenomenal con una calidad precio estupenda. El personal encantador, tanto el de la recepción como el de los desayunos y del restaurante. Mi mujer y yo hemos quedado muy satisfechos de nuestra experiencia. Lo recomiendo

Muy, muy bueno. Trato excelente Servicio del personal excelente Precio excelente Muy recomendable para visitar en mallorca centro... Parking , sala para deporte, sana conferencias... Desayunos y comida casera en menú economico. Y Lo mejor el personal Sin duda repito.

Situado en una tranquila zona, a unos 10 minutos andando del centro histórico, el Abelay es un entrañable hotel "de los de toda la vida". Si no se quiere andar, muy cerca hay autobuses que te llevan a cualquier punto incluido el aeropuerto. Destacar sobre todo la magnífica atención recibida, sobre todo por el personal de recepción dispuestos en todo momento a asesorarte en lo que necesitemos, incluido la facilidad para alquilar un coche. ¡¡¡Muchas gracias!!! La habitación muy correcta, con lo imprescindible para descansar y dormir en unas cómodas camas. La ducha ya tiene un dispensador de gel/champú, detalle importante para cuando viajamos con un trolley en avión y no tener que cargarlo desde casa. Asimismo el hotel dispone de un bar-restaurante también abierto al público en general con un buen menú a un precio sin competencia; comimos un par de días y vale la pena aprovecharlo. También podemos disfrutar de una amplia sala de televisión con una pequeña biblioteca para poder descansar los ratos de transición. Ah! y un pequeño gimnasio para los más deportistas. Respecto al desayuno, tiene poca variedad aunque la oferta es más que suficiente para salir bien desayunado.

Hotel un poco alejado del casco histórico. Eso es lo único malo. La atención del personal Fue muy buena, el hotel nuevo, cómodo, lindo y limpio. La verdad que volvería sin dudarlo. Desayunamos un día en el bar de abajo y estuvo muy rico. Recomendable