Usuario invitado
29 de agosto de 2023
Llegamos con las expectativas muy altas a este hotel, pero se empezaron a desvanecer nada mas hicimos el check in. El personal del hotel es antipático y maleducado, a excepción de una de las camareras del restaurante (supongo que será por el tema de las propinas), pero no contestaban a los ‘good mornings’ o ‘thank you’. Al solicitar o preguntar algo, te hacían sentir como que estabas molestando, atención al cliente bastante mejorable. Seguidamente, el restaurante clama al cielo. Acepto que es un lugar turístico y los precios suban, pero así lo debería hacer la calidad o eso pienso. La comida es carísima y de pésima calidad (la ensalada de la foto costó 19$ más taxes) con verdura cruda y carne pasada, no esperéis pagar menos de 60$ sí vais dos personas y quedaros con hambre. El desayuno es muy muy pobre en comparación con moteles de carretera típicos de allí, no hablemos de hoteles de su rango de precio… Todo eran plásticos de un sólo uso, calidad y atención al cliente CERO. La vista es increíble, pero eso es todo lo que tiene el hotel, nada más, sale mejor coger un hotel fuera del parque y madrugar para ir a ver el amanecer o el atardecer. En definitiva, no merece para la nada la pena los casi 300€ la noche que cuesta, ahorrároslo y dormid en otro sitio.