Fabrizio M
11 de julio de 2023
Empezaré diciendo que había reservado ocho meses antes, para tener el mejor alojamiento, tal y como pone en su web y folleto, bungalow en primera línea de mar con mosquiteras, llego y donde me pusieron, en una habitación grande detrás de las cocinas, sin un mosquitero, después de haber hecho las quejas necesarias después de dos noches nos trasladaron a los que dan al jardín, habitación y baño muy amplios, mosquitero en las ventanas roto, cero persianas, al despertar al amanecer entra una luz preciosa, el claqué del lavabo baila como la tapa del inodoro, cuando te sientas sale corriendo sin olvidar los ladridos nocturnos de los diez perros de la dueña que están en el jardín de su casa en el límite con las habitaciones; Se me olvidaba que cuando estás en la mesa de un restaurante siempre tendrás dos perros pegados a ti que querrán algo de comida, no olvidemos el mar y la fea playa de enfrente, el fondo está un poco embarrado y el agua siempre está turbia. ... bueno no quiero seguir con muchas pequeñas carencias, por otro lado el personal local es muy amable y hace todo lo posible para que te sientas a gusto, como el chef que hace unos excelentes espaguetis a tu gusto, cuando tiene los ingredientes, que no siempre incluyen plátanos. En conclusión, antes de llegar aquí, me alojé en otros dos lodges en Komba y Sakatia, un planeta completamente diferente. Al leer las críticas entusiastas anteriores, me hace pensar que algo ha cambiado.
Texto originalTraducción facilitada por Google