Hoteles en Nápoles con Desayuno

Muy buena ubicación alado de la estación central y del casco antiguo. El hotel es algo antiguo pero las habitaciones están bien equipadas. Cogimos habitación estándar (categoría intermedia) habitación muy grande ,con cama de matrimonio y sofá cama. Ducha grande, al agua le faltan unos grados más , a mi gusto , que me encanta el agua muy caliente. Cama y almohadas muy cómodas.El desayuno con abundante variedad de dulces coma quizás faltaban más productos salados. Personal muy amable nos ayudaron en todo. Posibilidad de contratar tours desde el hotel.

El hotel es estupendo, la habitación también, el personal no fue lo atento que debía ser. Nos quisieron cobrar 30 € de más, por unas consumiciones alcohólicas que no habíamos realizado, además de ser abstemio. Y mostrarme un papel escrito a mano con un garabato. Y le dije que siempre que había desayunado mostraba mi llave con el número de habitación. ¿Por qué en el bar no le pidieron la llave con el numero de habitación a esas personas que consumieron? También nos cobraron las tasas locales de 16 €, cuando en la reserva ponía que todo estaba pagado e incluido. Porque en otras reservas que he realizado siempre lo ponen claro que es el precio del hotel y aparte las tasas locales.

Reservé este hotel a través de una agencia y en el último momento por lo que no tenía un recibo de las condiciones del contrato de la habitación. Primero como puntos positivos el hotel está muy bien situado justo al lado de la estación central a cinco minutos te puedes mover por todo Nápoles y por toda la costa cogiendo el tren o el bus sin ningún problema en cinco minutos. La habitación dúplex a dos alturas para cuatro personas estaba también muy bien muy amplia una buena habitación con un piso para nosotros y otro piso para los niños. Tenían los media pensión el desayuno regular y la cena de buena calidad pero quizás un poco escasa para nuestro gusto y para lo que habíamos pagado. En segundo lugar las cosas negativas ,entiendo que el hotel se haya inaugurado en 1948 eso le da un encanto a antiguo y precioso pero eso no justifica la falta de servicios ,de limpieza y de mantenimiento. Las habitaciones huelen a humedad las vistas son un patio cerrado el baño los desagües la ducha está todo sucio y sin mantenimiento no tiene nevera en la habitación si tiene el sitio pero no nevera. En la media pensión te entra comida y postre y agua pero el postre siempre el mismo Tata de chocolate y rabata napolitana un día les preguntamos si había otra cosa y nos pusieron fruta y una bola pequeñita de helado con cristales de hielo y nos cobraron 23€ sin avisarnos antes que no entraba en el menú. Fui A quejarme a recepción y me cobraron 110€ más de un impuesto municipal al turista. Como no tenía el resguardo de la reserva tuve que pagarles todo lo que me dijeron con todas las condiciones que ellos me dijeron.un abuso. El personal de recepción se limitaba a hacer su trabajo sin mojarse en tus problemas ni el último día les avise para que nos llamarán a las 3,30 para ir al aeropuerto y pasaron del tema menos mal que habíamos puesto todos nuestros despertadores en el móvil, lo que sí hicieron bien fue pedirnos un taxi transfer aprecio cerrado para ir al aeropuerto. En definitiva una buena habitación en un buen hotel mal cuidado mal atendido y mal gestionado volveremos a Nápoles pero no a ese hotel.

Este es el peor hotel que puedas quedar en. El personal aquí es racista. No intercambiaron el aire acondicionado afirmando que están ahorriendo energía. No había aire en la habitación y la solución que nos dieron fue abrir las ventanas. Por favor no se quede en este hotel a ningún costo. Es un desperdicio de tiempo. Además, puede distinguir claramente que el personal aquí es racista. No lo recomienda en absoluto

La situación del hotel Decumani es realmente inmejorable, y lo mismo he de decir de los desayunos que ofrece. En el marco de una sala palaciega del siglo XVIII, el Decumani ofrece prácticamente toda la repostería tradicional de Nápoles: sfogliatelle, pastiera, caprese, taralli y múltiples tipos de bollería complementan el excelente pan napolitano, acompañado de tomates del Vesubio, mozzarella, provola, ricotta, salume y otras muchas tentaciones. Pero lo realmente excepcional del Decumani es su personal. En la recepción, la amabilidad y los conocimientos de Luigi y Eduardo resultan sorprendentes. Pocas veces son hemos sentido tan bien tratados en un hotel. En la sala de desayunos, la eficiencia y la solicitud de Francesco y Martina son insuperables; sólo comparables con su simpatía. Desde aquí, nuestro más sincero agradecimiento.

La ubicación es ideal a unos 400m de la estación principal. Aunque una buena ubicación no es una buena zona por la noche, hay muchos sin hogar, pero también hay algunos buenos restaurantes en la Plaza Garabaldi y buenas tiendas de café cerca para pasteles y café para desayuno. La recepción del hotel está en el segundo piso del edificio, gran escalera y como otros dicen no hay ascensor. No es bueno para las personas mayores o si tienes grandes equipajes para llevar. El Checkin estaba bien, el hombre explicó las bases y me llevó a mi habitación. La limpieza era perfecta, tan limpia, con muchas toallas blancas frescas, y el baño era sin puntos, sin problemas allí. La cama estaba bien, parecía limpia también, como alguien dijo decoración Quirky. Y sorprendentemente tranquila. Así que si no estás después de una habitación de hotel guapa está bien. Sólo se suministró el sabón líquido básico. La puerta del frente está cerrada a las 8:00 y los hoteles tienen acceso a las llaves para acceder, por lo que parece bastante seguro, cerrar temprano en esa zona es probablemente una buena cosa.

Hotel pretencioso sin atracciones articulares en un callejón oscuro cerca de la estación Garibaldi. Habitación anónima y fría con calefacción inaceptable (el sistema de ventilación de aire caliente sólo funciona a partir de las 20:00 horas y además hace ruido. Excelente limpieza según los estándares de la cadena ibis, pero relación calidad/precio como un manicomio: debe evitarse absolutamente, porque en). Puedes encontrar fácilmente cosas mejores en la zona por menos de la mitad del precio declarado.

Fantastic hotel!! Arrivamos anoche a las 22:00 y salimos esta mañana cuando nos mudamos a Ischia. Si todos los revisores negativos realizaron su investigación antes de reservar este hotel, entonces sabrían que es un hotel de parada en lugar de un hotel de larga estadía. El taxi del aeropuerto fue de 10 minutos y costó 20 €. Sí, el taxi es extremadamente “dodge” y no en algún lugar donde caminaría solo por la noche. Sin embargo, una vez dentro es como un lugar completamente diferente. El hotel está situado en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de El desayuno italiano es un desayuno italiano, que consiste en una pasta y café, así que creo que su intento de bacon huevos y harinas, etc, para satisfacer que la clientele era 10/10!

If i ever go to Napoles again this is where I want to stay. We firstly reserved a b&b close to the staition but it looked very dangerous at night and looks like it was an abandoned building, so we decided to change and looked for a hotel and this is where we went. We explained the situation to the staff and they were 5 stars. Even helped us booking a trip to Ponpei. We were supposed to be in Napoli 5 nights but they could only receive us 4. They helped us find another hotel for the last night. Very nice people, always smiling. Good breakfast and good location close to a tradicional restaurante ( lucciana). Also close to public bus where you can take and go to the center of Napoli. Very nice!! Reccomend

El hotel está muy bien situado, a un cuarto de hora andando de la estación central de Nápoles y más o menos a lo mismo del Centro Histórico. También tiene cerca la estación de metro de Cavour. Habitación pequeña, aunque es cierto que llevábamos una tarifa económica. Aún así, la cantidad de gel que dejan para una habitación de dos personas es ridícula, un botecito tan pequeño que, difícilmente se puede duchar una persona, no hablemos ya de dos. Nosotros compramos un bote de gel en un supermercado cercano. El buffet del desayuno no estaba mal aunque algo escaso, mucho dulce (tartas, bizcochos, croissants, etc.) y poco salado, algo de fiambre y algo de queso. Nada de comida caliente. En cualquier hotel que se precie tendría que haber, como mínimo, unos huevos revueltos, fritos o similares. Wifi gratuito en todo el hotel con buena velocidad. Personal amable, tanto en recepción como en el restaurante. No es mala opción, pero deberían mejorar esos pequeños detalles. Saludos viajeros...