Usuario invitado
1 de mayo de 2025
Desde la llegada a Ikonik Miraflores (a las 7 de la mañana) la atención del personal fue cordial y muy correcta. Se nos ofreció hacer un early check-in por 35 dólares (que incluía también el desayuno para dos personas), para así poder descansar y no tener que esperar al mediodía para disponer de la habitación. La ubicación del hotel es inmejorable, en pleno centro del barrio de Miraflores, a menos de cinco minutos caminando del Parque Kennedy. Las habitaciones son bastante grandes y disponen de todo lo necesario para pasar unos días en Lima, con una cama muy cómoda y, además, una ducha muy amplia. La limpieza es también excelente, pero son poco atentos a la hora de hacer las habitaciones, pues siempre nos ponían solo una toalla siendo dos y teníamos que llamar a recepción para nos subieran la segunda. Por lo que al desayuno se refiere, tiene un poquito de todo pero no destaca por una gran variedad. Además, en función de a la hora que bajes a desayunar encontrarás unas cosas u otras (sobre todo en la sección dulce). También hay que comentar que tardan mucho en reponer lo que se va acabando e incluso a veces tienes que avisarles tú.