Usuario invitado
2 de septiembre de 2024
Sólo puedo opinar del restaurante. He ido a comer en tres ocasiones diferentes con mi familia. El servicio del personal es excelente. Educados, atentos y simpáticos. Te hacen sentir agusto. De las tres veces que hemos ido a comer sólo les pongo un pero. Mi hijo pidió unos calamares a la romana y le sirvieron congelado industrial en el que el rebozado era el protagonista y el calamar un hilillo difícil de apreciar. Tenía una excelente opinión de la cocina de este negocio que se vio empañada por esta pifia carente de sentido. Si no puedes poner calamar fresco es mejor que lo digas y el cliente puede decidir, pero servir esa cosa es una falta de respeto. El resto de las comandas eran apropiadas y buena calidad a un precio aceptable. Pero el detalle de los calamares estuvo muy feo. Impropio de un negocio serio. El año que viene todavía tengo que pensar si regresaré. Parece una tontería, pero me dolió que cometieran esa estupidez. Local bien climatizado, baños muy limpios, precio muy aceptable en relación a la calidad y trato inmejorable... Pero lo de los calamares es un tiro en el pie.