Usuario invitado
8 de octubre de 2022
Los detalles marcan la diferencia. El Hotel es un Riad que se encuentra en una de las calles de la Medina a unos 10 minutos caminando de la famosa Plaza Jamaa el Fnac. Está decorado al estilo Art Decó de los años 20 lo cual contrasta y resulta interesante ya que difiere de la tradicional decoración marroquí aunque no es lo que te esperas encontrar en una ciudad como esta. Decorado con mucho gusto en tonos dorados negros y ocres, de aspecto moderno el hotel es un remanso de paz y frescura dentro de la calurosa Marrakesch. Cada habitación está inspirada en una cultura diferente, a nosotros nos dieron la habitación rusa la cual no recomiendo ya que estar pisando una alfombra con la hoz y el martillo, ver cuadros con connotaciones comunistas y políticas no es precisamente lo que uno se espera encontrar en una ciudad tan romántica y exótica como Marrakech y aún menos con la situación política actual, para mi gusto no es nada acertado y mi marido acabó por descolgar algunos cuadros. No pedimos cambiar la habitación porque ya estábamos instalados y después de esperar una hora y media a que nos dieran la habitación no quisimos perder más tiempo ya que queríamos descansar y aprovechar cada segundo de nuestra estancia. Cambiar de habitación y quejarnos nos parecía una molestia así que decidimos adaptarnos ya que el resto del hotel nos pareció muy bonito. Después resultó que la cisterna estaba muy dura y el último día acabó por romperse, que el Baño tenía varios desconchones en el lavabo y que la ducha tenía poca presión así que debimos quejarnos desde el principio y no lo hicimos y ese fue nuestro error. La piscina del hotel es pequeña y no es muy confortable, una esquina con paredes altas y de agua helada, al pasar por uno de los pasillos al lado de la piscina había un sumidero que estaba en medio del camino rajado, pisé sin darme cuenta se rompió y metí el pié dentro cayéndome y haciéndome daño. La teraza de arriba es muy bonita hay un jacuzzi de agua helada que se accede por unos peldaños, mi marido subió para verla pero el jacuzzi está sostenido por una estructura que no está fija al suelo por lo que al pisar casi se cae de espaldas, es un peligro, deben de fijar la estructura para evitar esto y que el cliente se pueda caer. El desayuno el primer día te resulta interesante con los dulces y panes típicos del país pero no tiene bufé lo cual se entiende porque es un Riad de pocas habitaciones pero podrían ofrecer a parte una carta de desayuno con frutas, queso, cereales otras opciones para que haya algo más de variedad. Nosotros nos alojamos 5 días y pagamos un precio de 215 euros por noche, por ese precio deberían de tener más opciones la verdad. Es cierto que el camarero te pregunta si quieres huevos pero nada más. Por último en el baño pone un cartel diciendo que si quieres comprar los productos puedes hacerlo en recepción. El jabón no te lo reponen como en Europa, tuve que reclamarlo por dos veces seguidas al cabo de varios días. El gel de ducha y