Usuario invitado
2 de junio de 2023
El Riad, formado por dos edificios conectados, es muy bonito. Las habitaciones son grandes, llenas de detalles decorativos que crean un clima especial. Los baños amplios con bañera tradicional y ducha moderna; las camas muy cómodas. En cuanto al desayuno es realmente espectacular por la cantidad y variedad de productos que incluían especialidades tradicionales; y en la azotea, un lugar muy agradable. Cuenta con una pequeña piscina climatizada, perfecta para un relajante baño tras las caminatas por la ciudad. Con todo, lo mejor ha sido la atención personal recibida desde el mismo momento de la llegada (bienvenida del gerente, té y pastas, sus comentarios y explicaciones). En particular nos gustaría destacar la atención de Nada que nos sirvió los desayunos; muy amable y sonriente, estuvo siempre pendiente de todo lo que podíamos necesitar. La ubicación del riad es muy buena (en una zona tranquila, a 15'-20' andando de la Plaza Jemaa-el-Fna), muy cerca de algunas de las visitas imprescindibles (Tumbas Saadíens, Palacio el Badi, Palacio La Bahia). Contratamos en el riad el traslado desde y al aeropuerto, puntual y cómodo.