Usuario invitado
19 de enero de 2024
Regresé con mi esposo de una semana en este maravilloso hotel, tuvimos la grata sorpresa de que nos pasaron a una suite muy espaciosa, limpieza impecable, ropa de cama muy limpia, piscina climatizada, desayuno copioso con productos de calidad, servido cerca de una chimenea, personal extremadamente amable, discreto y atento a todo, el lugar es tranquilo, muy relajante, muchas gracias al restaurante al fassia, ¡qué puedo decir! Todo el personal femenino es de una amabilidad que merece nuestro agradecimiento, la comida es de calidad y abundante, los platos son locales y muy, muy bien cocinados (por un precio similar al normal en otros lugares), ¡increíble! Recomiendo este lugar donde es difícil salir para ir a la ciudad (que conozco desde hace 33 años). Marrakech ha cambiado, gracias también a los caballeros que son discretos, que nos sirven el desayuno con inmensa cortesía y discreción, fue maravilloso. no cambie nada señora gerente (muy amable) tiene un gran equipo Anita y su esposo
Texto originalTraducción facilitada por Google