Usuario invitado
31 de enero de 2023
Partiendo de la base de que cubre con creces todo lo que esperas de un hotel de ciudad: ubicación, limpieza, servicio... me voy a centrar en los detalles que lo hacen un hotel excepcional. Esta decorado con un gusto exquisito, todos los muebles y las obras que adornan el hotel son piezas de primera. No hay réplicas ni sucedáneos que se rigen por tendencias, todo esta premeditado y desde luego el proceso de compra debe haber sido más que loable. Al igual que la restauración del edificio. Lo suelos hidráulicos, los tejidos de las sábanas, almohadas y llegando hasta el detalle de hacer sus propios jabones (que huelen genial). TODO esto sería imposible materializarlo si no es sintiendo cariño y pasión por lo que haces. Tampoco me quiero dejar atrás el desayuno, tenían productos locales con buffet y servicio en mesa. Estaba riquísimo y el personal era encantador. Espero repetir pronto e invito a todos los amantes del interiorismo, decoración o simplemente viajeros que quieran pasar unos días increíbles por Mahón, a seguir mis pasos y hospedarse en el Hotel Hevresac. Ya me lo agradecerán más tarde.