Iamnashi
12 de junio de 2024
Rara vez escribimos una mala crítica sobre un hotel/restaurante/servicio, ya que sabemos lo difícil que puede ser el negocio. Sin embargo, vamos a destacar que nuestra estancia de cuatro noches no ha sido muy buena. En primer lugar, nos asignaron el séptimo piso, donde se tiene acceso a un bar abierto en la azotea por la noche. Nos despertaron las dos primeras noches cuando clientes borrachos pasaron por delante llamando a nuestra puerta, hablando y riendo a carcajadas y con música sonando toda la noche hasta las 2 de la madrugada. Presentamos una queja en recepción, que nos aseguró que había un guardia de seguridad, pero que alguien llamase a nuestra puerta a la 1 de la madrugada era simplemente intolerable, sobre todo porque tenemos jet lag y no podemos volver a dormirnos después de que nos despertamos. Entonces nos ofrecieron cambiarnos a otro piso, con una habitación pequeña, que era tranquila. En general, ambas habitaciones eran muy básicas y no estaban especialmente limpias. Encontramos purpurina en la alfombra con confeti en forma de estrella y corazón (en la segunda habitación), los cajones están llenos de polvo, las toallas parecen viejas y había un algodón usado en uno de los baños. La ubicación del hotel era excelente, el personal se esforzó mucho por ayudarnos y es muy amable. Sin embargo, no nos impresionó mucho la limpieza. Las sábanas parecían limpias, pero una vez que las abriste, te diste cuenta de lo desagradable que era el protector del colchón, con pelos y manchas (ojalá no lo hubiéramos comprobado).
Texto originalTraducción facilitada por Google