Usuario invitado
23 de abril de 2022
El negocio lo lleva una familia y nos trataron como si fuéramos uno más de su propia familia. Aparte de amplias habitaciones, sobre todo la cama, limpias y con productos de calidad en el baño (no los típicos frascos de champú/gel rellenables), nos ofrecieron café y té según llegamos, con un dulce típico. Está realmente cerca de las zonas de interés y nos indicaron perfectamente cómo ir, aparte de aconsejarnos dónde cenar en base a nuestros gustos, también se preocuparon por si necesitábamos algo para nuestras vacaciones y nos ayudaron para conseguir un hotel a buen precio en el Mar Muerto. Descansamos muy bien y el desayuno todo natural y hecho por ellos, bastante completo y rico. En resumen, si tuviera que volver lo haría sin lugar a dudas, realmente agradecidos con el trato recibido.